Recibieron un distintivo por cumplir con los lineamientos.

Jojutla.- Microempresarios que fueron reconocidos este jueves con el distintivo “A”, por el cumplimiento de los lineamientos generales para la mitigación del covid-19, coincidieron en que han pasado una situación muy difícil, pero confían en que con la reapertura, poco a poco se puedan recuperar.

En una ceremonia realizada la tarde de ayer en la sede del Ayuntamiento, el alcalde de Jojutla, Juan Ángel Flores Bustamante, presidente del Consejo de Salud Municipal, entregó el citado distintivo a los establecimientos comerciales y de servicios que han cumplido satisfactoriamente con los requisitos de regularización de sus obligaciones administrativas y de protección civil, así como de observancia de medidas sanitarias dispuestas por la autoridad para combatir y mitigar la pandemia por covid-19; es decir, que mantienen la sana distancia, control de aforo, uso de cubrebocas, señalización, gel antibacterial, tapete desinfectante, toma de temperatura, entre otros.

Víctor Hugo Campos, propietario de un gimnasio, comentó que después de tres meses de no tener ingresos, a partir del lunes, con el semáforo naranja, pudieron reabrir.

“Estamos al 30 por ciento, pero ya estamos trabajando, que es lo que queríamos”, resaltó.

Zoyla Leyva, propietaria de un restaurante, reconoció una afectación económica, pues aunque tenían servicio a domicilio, no es lo mismo que brindarlo en el lugar.

“El equipo de cocina siguió funcionando, pero el equipo de servicio, los meseros, no. Por eso tuvimos que hacer un ajuste en el servicio, para que ellos pudieran tener también la oportunidad de seguir trabajando. Fue un sacrificio grande, tanto de nosotros como empresarios, como de ellos”, explicó.

Asimismo, agregó: “Estamos a un 30 por ciento de capacidad en salón, lo que es poco, pero mucho a la vez, porque con eso ya podemos recuperarnos”.

Por su parte, Liliana Domínguez García, propietaria de una estética, opinó que no ha sido fácil estar tres meses sin trabajo y con la observancia de los protocolos.

“El estar cerrado implica que hay poca gente, porque todavía tiene miedo, pero estamos contentos porque ya estamos trabajando”, dijo.

Por último, estimó que poco a poco, y con “el favor de Dios”, podrán recuperarse.