Tlaquiltenango. Pese a que este municipio, al igual que los demás, vive una situación económica difícil debido a la falta de recaudación, no se ha considerado recortar el salario de los trabajadores, sin embargo, sí se les solicita su aportación “voluntaria” para la compra de insumos y despensas.

“Desde que asumimos la administración, hemos hecho guardaditos para enfrentar contingencias y hemos reducido el gasto común. Hemos tratado de no abusar. Hemos respetado a los trabajadores en su salario, no les hemos disminuido”, declaró el alcalde Jorge Maldonado Ortiz.

Sin embargo, aunque no les han hecho recorte, los funcionarios municipales “se han solidarizado” ante la contingencia y han apoyado para que, con su “granito de arena”, el municipio haya comprado gel, cubrebocas, despensas, etc.

“Pero no cortándole su salario, sino por invitación, y haciéndoles conciencia”.

Interrogado acerca de cuánto es esa contribución, respondió que la invitación es “abierta” y aportan de un 10 a un 15 por ciento de su salario para adquirir estos productos.

Apuntó que hasta el momento no se tiene considerado recortar personal, salvo que no respondan a la exigencia del trabajo.

“Hemos estado haciendo conciencia con cada trabajador, de que somos servidores públicos y nos debemos a la población. Nuestro deber es atenderlos con cordialidad, amabilidad, respeto, porque nos debemos a ellos, pero si tenemos quejas de la población, no me quedará otra que darle las gracias a los que no estén conscientes de las funciones para las que fueron contratados”.

Reconoció que para finales de año, el aguinaldo sí se verá afectado, aunque todavía no se sabe en qué proporción.

“Les hicimos conciencia a los trabajadores de que en un momento dado no les afectamos en sus salarios, pero es probable que en diciembre sí se vean afectados, a lo mejor no al cien por ciento. Si el año pasado nos tocó para dos tres pollitos, a lo mejor hoy nos toca para uno. Deben estar conscientes de que de una u otra forma tenemos que hacer sacrificios todos”.

Mencionó que el 20 por ciento de los trabajadores del ayuntamiento sigue sin trabajar y confinados en sus casas por su condición vulnerable, su edad y los padecimientos que tienen.