José Guadarrama Cárdenas, representante del grupo ciudadano, informó que tras una inspección que se realizó en la zona la mañana de ayer, constataron la presencia de pozos y excavaciones, con vestigios arqueológicos. “Los vecinos supervisamos el espacio, junto con los investigadores, donde pudimos verificar que se encuentra una zona arqueológica, la cual ha sido saqueada por vecinos y han comercializado piezas al mercado negro”, dijo.

Agregó que desde hace tiempo atrás se acordó con el titular de la CEAMA (Comisión Estatal del Agua y Medio Ambiente) que para que se pudiera continuar con los trabajos del relleno sanitario, se requerían de tres estudios; uno era complementar los estudios de impacto ambiental, el geológico y otro más el del INAH, ya que existe esta zona, “y lo que buscamos es proteger el patrimonio cultural de nuestros antepasados que representaría este espacio”, dijo.

Por ello hicieron el llamado a las autoridades estatales para verificar las condiciones en que podría afectar a esta zona el relleno sanitario y sobre todo, la intervención del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para resguardar esta zona.

Los ciudadanos que rechazan el relleno sanitario mencionaron que será el próximo martes cuando los investigadores emitan los resultados de los estudios de impacto ambiental, para verificar la factibilidad de que se continúen con los trabajos; sin embargo, Guadarrama Cárdenas mencionó que cerca de este espacio se han encontrado nacimientos de agua.

Cabe mencionar que actualmente los trabajos del relleno sanitario se encuentran detenidos, pese a que llevan un 50 por ciento del avance de la construcción de este espacio que funcionará proporcionando servicio a los municipios de Jojutla, Tlaquiltenango, Tlaltizapán, Zacatepec y posiblemente Puente de Ixtla.