Los uniformados mencionaron que a la fecha no se ha logrado que el gobierno municipal aplique los aumentos salariales, ni el seguro de vida que tanto ha señalado la corporación debido al riesgo que representa su labor policial.
Aseguraron que en los últimos años se ha incrementado la delincuencia, no sólo en el municipio, sino en la entidad y en el país en general, lo que los pone vulnerables en caso de alguna contingencia mayor.
Asimismo, mencionaron que aún está pendiente la dotación de uniformes este año. “Las autoridades municipales se comprometieron a atender esta situación, principalmente porque nuestra inquietud es dejar desprotegida a nuestra familia en caso de que durante el desempeño de nuestro deber pongamos en riesgo nuestra vida. Por eso buscamos que no que quede desamparada la familia”, señalaron.
Los uniformados explicaron que en el último año la comunidad con mayor incidencia fue Cuauchichinola, donde no sólo se presentó el robo a casa-habitación y comercios, sino también secuestros y extorsiones aquejaron a la comunidad, “donde hemos tratado de hacer frente a los auxilios que ha solicitado la población, donde en algunos casos se ha puesto en riesgo nuestra vida”, comentaron.
Así, hicieron el llamado a las autoridades municipales para que en este último año de gobierno se considere el presupuesto necesario para el seguro de vida y sobre todo, el incremento salarial, a fin de mejorar sus condiciones.