Trascendió que los ejidatarios en algún momento tuvieron la disponibilidad de donar un terreno para la creación de un relleno sanitario, “sin embargo el alcalde Gabriel Miranda Gallegos no apoyó con la gestión de trámites y de recurso y la disponibilidad de este sector para dar seguimiento y se perdió la posibilidad hacer acciones que ayuden a disminuir la contaminando”, señaló Valle Gómez.
El concejal señaló que la severa contaminación que este tiradero a cielo abierto está generando no sólo al municipio, sino a toda la región, es un negocio redondo del propio alcalde Miranda Gallegos, ya que a pesar de que le es negado el acceso a las cuentas públicas se ha corroborado que por depositar los desechos en este espacio se erogan 30 mil pesos mensuales del erario público, espacio que es rentado al Ayuntamiento por familiares del propio munícipe.
Aseguró que ninguna autoridad en materia de medio ambiente ha tomado cartas en el asunto y el presidente municipal ha seguido manteniendo este espacio, a pesar de los señalamientos y el descontento ciudadano, sin presentar ningún proyecto que favorezca al medio ambiente.
Cabe resaltar que la basura acumulada son tres y media toneladas diarias, asimismo este municipio no cuenta con un programa de separación de basura.