Héctor Rojas Román, quien dijo ser el propietario del bar “La Chulada”, ubicado sobre el bulevar 17 de Abril, aseguró que el viernes pasado, alrededor de las 11 de la noche, un elemento policíaco se acercó al lugar para solicitar un reservado, presuntamente para la hija del director.
“Naturalmente le dimos la atención”, expuso el empresario, quien concedió un espacio a la joven y sus amigas.
Sin embargo, poco más de media hora después, aseguró que el director de seguridad pública, Gualberto Hernández, se presentó en el lugar ebrio, y tuvo un altercado con los acompañantes de la que presuntamente es su hija, argumentando que no tenía porqué estar ahí.
Rojas Román sostuvo que incluso le dieron un golpe en el estómago a un varón que acompañaba a las muchachas.
“Yo lo vi personalmente, iba ebrio y me amenazó”, afirmó.
Sostuvo que el comandante se puso violento y no dejaba de proferir insultos, por lo que la seguridad del local le impidió la entrada. Enseguida, continuó, comenzó a tomar fotos con su celular, hizo algunas llamadas y llegaron por lo menos cinco patrullas que rodearon el lugar y se mantuvieron a la expectativa.
Un agente entonces pidió que quitaran los autos que se encontraban estacionados afuera del lugar o de lo contrario serían infraccionados, pero al no encontrar razón, “no le dije a los clientes y efectivamente, les quitaron las placas”.
No supo precisar la cantidad de autos que fueron despojados de las placas, lo que sí destacó fue que no dejaron la boleta de infracción. Entre los afectados mencionó a Georgina Castrejón Cárdenas (placas PWE 9371), Jovany (PWK 3964) y Saúl Gorena Varela (180 NUJ, del DF) que no las han recuperado.
Entrevistado al respecto, Hernández Abarca negó las acusaciones y hasta se quejó de lo que consideró difamación contra su hija, que –confirmó- es menor de edad.
Aseguró que ella nunca estuvo ahí y que él nunca ingresó al bar, sólo estuvo en el camellón del bulevar, debido a un operativo realizado por quejas ciudadanas.
Reconoció que sí hubo algunas infracciones, pero no exactamente en ese negocio y fue por un hecho de tránsito terrestre y rechazó que no se hayan dejado las boletas correspondientes.
“Se están realizando operativos a petición de los vecinos de la colonia Constitución del 57, pues negocios como ese han estado perturbando la tranquilidad de la colonia con música inmoderada y hacen cortes de circulación de manera indebida”.
Advirtió que podría proceder en contra del dueño del lugar por difamación, tanto como padre de familia como autoridad, aplicando medidas regulatorias.
Por su parte, el secretario de la comuna jojutlense, César Bahena Va-lle, declaró al respecto que “se trata de malos entendidos. Yo no ten-go conocimiento pleno de las cosas, porque además no hay una que-ja formal, escrita, que haya llegado al ayuntamiento por parte de los supuestos afectados”.
-¿Se le preguntó al comandante sobre la situación? “Bueno, sí… nos dijo que se trató de una revisión de rutina de alguien que solicitó un auxilio”, respondió Bahena Valle.
Y en cuanto a que se quitaron algunas placas, el funcionario en cues-tión, desconoció el hecho, reiterando que supo que se quitaron algu-nas, pero “no tengo el número de folios”.