Iván Salgado Pérez, de 24 años de edad reveló en conferencia de prensa, que el pasado 16 de mayo llevó a su esposa de 22 años Jecica Domínguez Román de 22 años, al citado hospital para que tuviera a su hija.
“Le practicaron una cesárea y los doctores dijeron que iba a ser normal, pero al acabar, la dejaron desangrando aproximadamente seis horas y fue cuando salió el doctor a decirme que le tenía que extraer su matriz, que porque ella estaba muy grave y cuando me dice eso, él me hizo firmar pero no me dijo nada. Quisiera saber cuál fue el motivo y no me lo dicen”.
Comentó que por la atención a su mujer, que salió del hospital el día 19 de mayo, con su hija en buen estado, debe llevar 20 donadores de sangre. “Sigo debiendo los 20 donadores y lo que es el estudio que le hicieron; tengo ahorita lo que es su matriz en mi casa, por lo mismo, que no tengo el dinero”.
Consideró que la extirpación que le hicieron a su esposa pudo generarse por negligencia médica. “La vez pasada hablé con el director y no me hacía el ultrasonido de mi esposa y a causa de eso, se vinieron todos esos problemas”.
Expuso que analiza presentar una denuncia penal porque “no fue una gracia lo que le hicieron a mi esposa”.
Por su parte, entrevistado vía telefónica, el director del hospital, Donato Pineda Ocampo, dijo no recordar el caso y daría una posición más tarde. Finalmente, rechazó las acusaciones y aseguró que se le informó al esposo de la paciente que la mujer presentó un problema en la placenta, que fue lo que le provocó el sangrado excesivo y no fue porque se le haya dejado sin atención. Explicó que el útero no se podía contraer y el sangrado no cedía, por eso se tomó la determinación de retirarle la matriz.
Aseveró que no hubo ningún tipo de negligencia médica.