El contingente, con alumnos y profesores partió de la sede del plantel hasta la plaza cívica, en donde se realizó un festival artístico con cantos y baile.
María Estela Aranda Figueroa, directora del plantel, expuso que para cumplir con el requisito, primero se realizó un diagnóstico y después un taller. Ahora realizarán dos días de actividades para cubrir las condiciones. El primero fue éste de la marcha y hoy viernes realizarán una reunión con padres de familia.
“Invitamos a los papás para que tengan un convivencia con sus hijos, al final habrá una conferencia y cerraremos la semana de la paz”.
Reseñó que desde hace dos meses trabajan en este proyecto, pero en realidad fueron los jóvenes quienes lo asumieron con entusiasmo. “La intención de estas actividades es que los jóvenes se expresen por la paz, qué es lo que quieren, a qué se comprometen para construir la paz y también al interior del Cobaem que no haya violencia en el plantel”.
Detalló que contaron con el apoyo de José Antonio Sandoval Tajonar, presidente de la fundación Don Bosco.
Consideró que estas actividades sí pueden realmente a contribuir a la paz, porque a veces los jóvenes pierden la relación de amigos o se deteriora la comunicación con los padres y la intención es restablecerla y fortalecerla.
“Les pedimos que cultiven la paz, que sean los formadores de ella en sus casas, en su familia, no haya violencia, no haya gritos y se construya la paz”.
Por su parte, Sandoval Tajonar comentó que el proyecto de escuelas libres de violencia, a petición del gobierno el estado, se está llevando a todas las escuelas de nivel medio superior, a dos universidades (la UTEZ y la Upemor) y a 13 secundarias generales en una primera etapa. Las preparatorias federales podrían incorporarse también, así como las preparatorias de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos.
Opinó que con estas actividades, los jóvenes toman conciencia de que a todos nos toca construir la paz. No vendrá sólo de las acciones del gobierno sino de las acciones que realiza la sociedad y esas parten del compromiso personal.
Una alumna de sexto semestre comentó que la situación está crítica en materia de inseguridad y el temor es que crezca más la violencia y ya no pueda combatirse. “Hicimos esta actividad de todo corazón para lograr que haya paz”.