Javier Ocampo Lara, presidente seccional del sindicato, explicó que en principio, el problema no era el director sino el jefe de operaciones Artemio Campos Hernández, a quien Ambriz Cervantes le dio muchas facultades y con ellas maltrata a los trabajadores.
“El problema se suscitó desde 2007 en contra del investigador Campos Hernández porque abusa de su poder otorgado por el director. Éste le ha tolerado todas sus fechorías, le ha delegado mucha responsabilidad, y a pesar de que hemos manifestado esta situación y hemos llegado a acuerdos, no se han respetado”, apuntó.
Aseguró que Campos Hernández se mete con los trabajadores, los hostiga, les esconde el material de trabajo, llegando incluso a amenazar de muerte a uno de ellos. “Se burla, los ofende, directa o indirectamente, estropea su trabajo, sus funciones. Tiene el control hasta de los empleados de limpieza y vigilancia, que son empresas privadas”.
Comentó que ya en años anteriores este asunto se había tratado con personal del INIFAP a nivel central, junto con su dirigencia sindical a nivel nacional, y habían acordado que ya no tendría trato con los trabajadores, pero el acuerdo no se ha respetado.
Durante estos tres años, aseveró, el autor intelectual ha sido Ambriz Cervantes, porque ha accedido a los convenios, pero al final no los cumple.
“Ya no queremos la destitución de Artemio (Campos), él pasa a segundo término, sino la destitución de Ambriz, que es el que ha generado toda esta situación”.
Finalmente, dijo que a partir de ayer se manifestarán diariamente hasta que no llegue una comitiva de la regional y del nacional, tanto de oficinas centrales como del comité ejecutivo nacional del sindicato.
“Es un paro de brazos caídos; lo vamos a hacer diario durante algunas horas del día, no vamos a tomar las instalaciones”.
Los trabajadores del plantón también cuestionaron la calidad de investigador de Artemio Campos, quien –dijeron- sólo es productor de caña.
Ambriz Cervantes no fue localizado en su oficina para manifestar su posición.