“La semana pasada nos reunimos con el presidente José Carmen Cabrera Santana y parte del cabildo. El edil aseguró que ya estaba todo, pero fue una mentira más del presidente, no nos lo dieron, no nos lo han dado y creo que no nos lo van a dar, por eso estamos inconformes”, declaró.
Añadió que aunque el presidente ofreció regularizar el apoyo económico y pagarlo completo, después el síndico Ramiro Sotelo Rodríguez excusó que no hay dinero y que primero tienen que pagar a los trabajadores sindicalizados, después a los de confianza, después a las autoridades municipales y al último a los ayudantes.
“Al último nos dejan a nosotros, y eso si alcanzamos. No entendemos esa postura del presidente y el síndico, los ayudantes somos los primeros en recibir la problemática del municipio y creemos que debemos ser los primeros en cobrar, antes de los sindicalizados. Pero estos dos años y medio nos mandan hasta lo último y hasta el tercer día andamos cobrando. Veo injusto eso”.
Más aún, prosiguió, en su caso particular, así como el del ayudante de la Plutarco Elías Calles, Amado Noguerón; y el de la colonia Emiliano Zapata, Noé Castillo Torres, tienen congelado su apoyo económico desde hace siete meses por apoyar la causa del Cerro de la Tortuga.
“Seguiré apoyando el movimiento del Cerro de la Tortuga (de no construcción a viviendas en sus faldas), no importa que no nos pague y seguiré trabajando para la comunidad”.
No descartó que haya otra manifestación de ayudantes como la de hace unas semanas, sin embargo, lamentó que alrededor de la mitad de los 21 de ellos no les guste participar. “Seguiremos en pláticas para ver qué podemos realizar, para manifestarnos, para ver qué podemos hacer; una demanda, o ver a los diputados del Congreso para que hagan su parte. Hay varias cosas que hacer, nomás que nos pongamos de acuerdo. Me molesta que compañeros ayudantes se hacen tontos para tragar a puños, son institucionales, se dejan que les pongan la bota en el cuello. Más de diez se dejan poner la bota en el cuello, son sumisos, no les pagan, pero se agachan. Creemos que les hace falta carácter, espíritu de lucha, porque el apoyo es una obligación del ayuntamiento, lo dice la Ley Orgánica; no dice cuánto pero sí lo marca la ley. Lo que se está haciendo el edil es justificable. Para ganar, necesitamos estar unidos para pelear”.