“Aquí hay mucho ajetreo, porque entran camionetas, vienen armados, y pues la gente se espanta. Después de las 11 (de la noche) ya no puede salir la gente. Hay vecinos que se dedican al secuestro y todo eso, pero por temor y miedo no se denuncian los hechos que pasan”.
Refirió que actualmente la colonia está más o menos tranquila, pero hasta hace poco, se habían dado delitos de alto impacto y se siguen dando. “Se han dado secuestros o han venido a tirar cuerpos. También ha habido balaceados. Ya van a tres casas a las que balacean”.
Sostuvo que han solicitado la intervención de las autoridades, pero no se ha detenido la situación. “Cuando se solicitan, de volada llegan, pero hay veces que llegan demasiado tarde y es cuando pasa todo. Hay veces que han pasado los sujetos en motocicleta y le tiran balazos a los chavos y hasta a las casas particulares, y ya mejor no los persiguen”.
Dijo que la delincuencia ha hecho quebrar a por lo menos tres negocios en los últimos meses. “Una mueblería y otro de materiales, cerraron por completo por el secuestro. Primero llegaron y les pidieron piso y no dan, y al último lo secuestran. Ya nos ha pasado aquí, que nos han estado extorsionando”.
Consideró que es necesario que se instalen retenes para evitar que los delincuentes anden armados. “Tienen que hacerse retenes en las diferentes colonias, que se pongan en puntos estratégicos, porque pasan con camionetas y motos y no los revisan. Como ven que traen placas de Morelos y que son vecinos de aquí no los paran, los dejan pasar, revisan a los que vienen de fuera y es donde vemos que esos son los que vienen armados”.
Aseguró que la ciudadanía tiene miedo a denunciar porque saben que luego hay represalias. “Ahorita ya empieza la revuelta de las extorsiones y todo eso, mucha gente ya me ha ido a ver, pero yo les digo que nada se puede hacer, porque después van contra nosotros, ya nos han amenazado. Dicen que si hacemos algo, ya saben quiénes son los del comité y van a ir contra el comité directamente”.