Los hechos ocurrieron alrededor de las 10 de la mañana, cuando el vehículo en el que viajaba el diputado y su esposa (ella iba al volante), un Passat plateado, VW, modelo 2013, sin placas de circulación, sólo con un permiso del estado de Guerrero, con propaganda de Joaquín Carpintero en el medallón –que le fue retirada después- fue impactado por un costado por el autobús, de número económico 120, de la mencionada línea, quien dio vuelta a la derecha sobre el automóvil, en el citado crucero, con dirección a Zacatepec.
Como resultado, el automóvil sufrió daños del lado izquierdo del conductor, mientras el camión sólo tuvo un raspón. No hubo lesionados, pero los pasajeros del autobús tuvieron que interrumpir su viaje y descender. Ambos vehículos fueron enviados a la Dirección de Tránsito.
Álvarez Valero –quien fuera regidora en Tlaltizapán en el periodo anterior-, narró que iba a dar vuelta en el crucero, cuando el camión se le cerró por su izquierda. “Me dio un rayón y me voló un espejo”.
Dijo que no fue un accidente grave y sólo esperaban que las aseguradoras se pusieran de acuerdo.
El diputado Joaquín Carpintero, quien solicitó licencia al cargo el lunes pasado y la obtuvo este martes, aseguró que el vehículo no era del Congreso del estado, como se especuló, sino propiedad de su esposa.
Señaló que el “verde” estaba en el carril de “alta” y cuando pasaron ellos, le dio el cerrón. “Tenemos asegurado el carro y estamos esperando un arreglo con el seguro de ellos”.
Dijo que las aseguradoras se iban a poner de acuerdo para ver de quién es la responsabilidad.
Por su parte, Guadalupe Vianey Trujillo Ascencio, esposa del conductor del autobús, Eric Aguirre Sedeño, se quejó del trato que le dieron a su marido en este caso y presumió que había mayores atenciones para el diputado.
“Mi esposo iba a dar vuelta a la derecha y como es un camión grande, se tenía que abrir un poco para dar vuelta, y la señora se mete, quiere rebasar por la derecha y lógicamente, ella quedó en medio del autobús y una barda. Dicen que mi esposo tiene la culpa, porque quiso rebasar por la derecha”.
Afirmó que quien dijo ser jefe de turno (de la Policía de Tránsito) se portó déspota, y le dijo que si no acataba las indicaciones que le diera, le iban a meter grúa al camión y lo iban a detener (al chofer) con los policías.
“No se vale que le den todas las atenciones del mundo, somos iguales”.
Después del medio día, las aseguradoras no se ponían de acuerdo.