Los vecinos inconformes mencionaron que esta barranca a la altura del puente Loma Linda se ha convertido en un foco de infección por el estancamiento de aguas negras, además de que ha sido utilizado por muchos como basurero, pero sobre todo no ha tenido el mantenimiento adecuado ni mucho menos se ha dado seguimiento al proyecto que quedó inconcluso.
Recordaron que fue en el año 2012, cuando autoridades federales, estatales y municipales inauguraron la obra de construcción del muro perimetral de este cauce a través de la inversión de recursos federales que integraron los trabajos de la segunda etapa de la obra de protección de la "Barranca Salada" en el municipio, obra que estuvo a cargo de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
La obra integró la construcción de 1.4 kilómetros en la que se amplió la capacidad hidráulica del cauce de 36 a 102 metros cúbicos por segundo, donde el muro de contención se construyó con materiales sustentables que permiten el crecimiento de la vegetación nativa, y que se puede adecuar conforme a las circunstancias extraordinarias, sin embargo, el proyecto no ha quedo concluido y en temporada de estiaje se agrava la situación, mientras que en temporada de lluvias está el riesgo de desborde por la falta de mantenimiento, dijeron los quejosos.
Señalaron que actualmente las condiciones de la barranca son de deterioro, "esta obra donde en total se invirtieron más de 36 millones de pesos de recursos federales con la finalidad de beneficiar a la población, hoy se está desaprovechando, se supone que era para garantizar la seguridad de integridad física y de bienes materiales, ya que se ponían en riesgo las familias porque cada año, en la temporada de lluvias, nos inundábamos, por el exceso de escurrimientos y no se ha cumplido con el objetivo", citaron los afectados.
Por ello, una vez más, hicieron un llamado a las autoridades federales, estatales y municipales para verificar las condiciones de esta barranca que en temporada de lluvias recibe el cauce de las aguas pluviales y en caso de no tener el mantenimiento adecuado está el riesgo de desborde, lo que pone en riesgo a las familias que se ubican en la zona.
Los afectados comentaron que al medio día esta barranca despide desagradables olores, debido a la evaporación de las aguas residuales que se descargan en la barranca, mismos que permanecen estancados en esta temporada.