José Antonio Lara Tovar, padre de un joven estudiante del segundo grado grupo B, se acercó a esta redacción para denunciar que su hijo fue dado de baja, presuntamente por traficar con mariguana en el plantel.
“El viernes pasado nos dijeron que teníamos que presentarnos con el director Rafael Ortega Gutiérrez y la subdirectora Guillermina Uriza Uribe, porque había un asunto de mucha gravedad hacia nuestro hijo. Nos presentamos y nos dijeron que nuestro hijo era introductor de marihuana, pero que este asunto lo estaban tratando ahí íntimamente porque los alcances o las consecuencias de una acusación de esa naturaleza eran muy graves y que nos diéramos por satisfechos que lo estaban tocando en la intimidad”.
Las autoridades escolares, prosiguió, le dijeron que su hijo ya no se podía presentar a clases, que le iban a regresar los papeles.
“Entonces yo les dije que si verdaderamente había una situación grave, y hay las pruebas contundentes, pues yo estaba en la mejor disposición que en este momento nos presentáramos ante el agente de ministerio público y que esto se siga de oficio porque lo que me estaban planteando es un delito de suma gravedad, y la acusación infundada me parece que también es de suma gravedad”, apuntó el padre de familia.
Dijo que en respuesta, le señalaron que lo más que podían hacer es que como ya se iba a acabar el curso, los papeles no se los iban a entregar, pero que ya habían hecho una evaluación y que se diera por satisfecho.
Apuntó que se considera un padre de familia responsable, junto con su esposa, y por ello pedía pruebas y explicaciones, y si le demostraban la responsabilidad de su hijo, asumía las consecuencias.
Sostuvo que nunca le dieron pruebas concretas de la presunta venta de droga, solamente que entre sus mismos compañeros había sido señalado.
Al no obtener pruebas, acudió a la visitaduría regional de los derechos humanos a presentar una queja, pues considera que se está vulnerando el derecho a la educación de su hijo.
“Yo exijo que presenten las pruebas y si mi hijo tiene una responsabilidad, pues que la pague, pero si no que se retracten de la grave acusación que le están haciendo porque lo están estigmatizando”.
Incluso aseguró que el adolescente se practicó la prueba antidoping, que salió negativa.
Por su parte, la subdirectora del plantel Guillermina Uriza Uribe se limitó a hacer declaraciones, pues reiteró que el asunto era “muy delicado”.