Zacatepec.- Encerrado a piedra y lodo, y entre presiones de más de un centenar de personas, el Cabildo de Zacatepec habría rechazado la tarde de ayer la reforma que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo.

A las 10 de la mañana, grupos de católicos y cristianos, que se unieron por la causa, intentaron hablar con los integrantes del Cabildo para exigir que sesionaran para rechazar la modificación a la ley, ya que de no hacerlo, en automático se consideraría a favor.

Expusieron que si se modifica, se beneficiaría a una minoría, no a la mayoría y el matrimonio natural es sólo entre un hombre y una mujer.

Sin embargo, sólo encontraron al secretario municipal Jesús Pedroza, quien se reunió con una comisión en privado y les prometió que convocarían a la brevedad al Cabildo.

Afuera, llegaron personas de la comunidad lésbico gay, con quienes tuvieron un enfrentamiento verbal. Ambas partes se acusaron de intolerancia.

Los grupos religiosos portaban pancartas en las que decían sí a la vida, sí a la familia natural.

Manuel Jaramillo, representante de la comunidad católica del municipio, destacó que algunos regidores revelaron que están siendo presionados por el gobierno estatal, para aprobar la reforma.

Otra mujer dijo que no son homofóbicos, sino que están a favor de la familia, de “lo que Dios creó”.

Los manifestantes se congregaron en la casa ejidal, frente a la presidencia, y llamaron a regresar a la una de la tarde.

La gente se congregó nuevamente en la presidencia municipal a la hora señalada y se entrevistó con el edil Francisco Salinas Sánchez, quien llegó al lugar y tras la presión de la gente, y un desencuentro con los presentes, el alcalde se comprometió a realizar el cabildo a las tres de la tarde.

Alrededor de las cuatro de la tarde, el secretario municipal Jesús Pedroza salió a informar que el Cabildo había rechazado la reforma. Se reunió otra vez en privado con una comisión de los inconformes y no dio más detalles de que la votación fue en contra. Dijo que no diría por cuantos votos ni cómo se votó y pidió a los ciudadanos que se salieran, para no enfrentarse con los representantes de los homosexuales que llegarían después.

Pero los inconformes no se retiraron, pues querían ver el acta firmada de rechazo y se mantuvieron en plantón, hasta que les mostraron el documento a una comisión.

 GAYS SE QUEJAN DE DISCRIMINACIÒN

Tras la presunta votación en contra de la aprobación a la reforma al matrimonio igualitario la tarde de ayer jueves en Zacatepec, el Ayuntamiento local impidió la entrada a un grupo de personas de la diversidad sexual, que reveló que el edil Francisco Salinas votó en contra, por miedo a afectar su carrera política.

Tras el anuncio del secretario municipal, Jesús Pedroza, de que la reforma había sido rechazada, llegó un pequeño grupo de personas integrantes de la comunidad gay, pero los policías no a todos los dejaron entrar.

Andrés Salas Salgado, secretario de diversidad sexual del Partido de la Revolución Democrática estatal, deploró que por instrucciones del presidente municipal Francisco Salinas no se les permitiera la entrada para hablar con los integrantes del Ayuntamiento.

“A los grupos religiosos sí los dejaron entrar para que nos dijeran porqué votar en contra y a nosotros no, cuando es su obligación recibirnos”, resaltó.

Reveló que la semana pasada se reunió con el alcalde y le pidió que fuera omiso a las presiones de grupos religiosos, pero Salinas Sánchez respondió que votaría en contra porque si no, su carrera política se acababa.

“La verdad es que se va a acabar, porque el hecho de que no vote a favor de los derechos humanos, permite ver que el señor no tiene conocimiento en absoluto de la ley”.

Es lamentable –dijo- que un presidente municipal tenga votaciones homofóbicas y de los regidores qué se puede esperar, si apenas saben leer, remató.