La Sagrada Familia, grupo hegemónico desde hace tres décadas, cuenta con una corriente que tan le hace contrapeso que, por votación, le ganó la primera diputación plurinominal en la siguiente legislatura local con el joven Mario Arizmendi y, no hace mucho, también contaron para que el gobernador Marco Adame impulsara a su hijo, Juan Pablo Adame Alemán, a un sitio pluri en el Congreso Federal que lo hace virtual legislador.
Hace dos sexenios llegaron a Morelos una familia apellidada Terrazas que empezó a hacer tareas desde abajo en el PAN local. Una talacha de zapa y paciencia que comienza a rendir frutos. Son muy jóvenes, casi ninguno rebasa los 30 años y han mostrado estar listos para tomar las riendas generacionales. Empujaron a Mario Arizmendi en la primera posición. En el segundo lugar va Erika Cortés Martínez, una joven señora que entra en este partido con aquella importante ola Maquío en 1987 y en el tránsito político y partidista se hace esposa de Germán Castañón. Decimos lo anterior, porque se escatiman méritos a las personas, y la señora Cortés los tiene de sobra, más allá de la condición que su marido sea el presidente estatal del PAN. Es bien vista su posición entre los diversos grupos blanquiazules.
Y la sorpresa sería Javier Bolaños Aguilar, subsecretario de Gobierno, en la tercera, y esperamos de verdad que no sea por el compromiso de las concesiones que la Dirección del Transporte –su subordinada, según el organigrama de gobierno— iba o entregó a afines (se mencionan entre 450 y 650 de a 50 mil cada una para revender, así que hagan cuentas), pero en las entrañas se avisa que es propuesta de Oscar Sergio Hernández Benítez, todavía secretario general de gobierno y jefe mayor de Francisco Alva Meraz, el cuestionado director del Transporte.
Regresando a la política-política, es buena noticia para el PAN que los Terrazas hayan estructurado cuadros que serán, seguramente, el nuevo rostro del partido.
¿Y Colosio?
Inmersos en guerritas internas, los priistas se olvidaron del referente más importante de sus últimos 50 años: Luis Donaldo Colosio Murrieta, el candidato presidencial asesinado, del que pocos creen su victimario sea Mario Aburto. Quizá el columnista no se enteró, pero el 23 de marzo, el viernes pasado, la nota entre los tricolores morelenses eran más de sus confrontaciones que del ex presidente nacional del PRI, que en el mismo marzo de 1994, dejó la huella en un discurso y pareció que ahí se salieron todos los demonios oficialistas, poderosos y del mismo sistema para que no lograra su objetivo.
Tan ocupados se encuentran los priistas que se les olvidó el sonorense. Año con año, el único que aparecía del círculo colosista con la congruencia de la mano y la voz de denuncia fuerte ha sido Víctor Samuel Palma César. A partir del 23 de marzo de 1994 los colosistas surgían por todas partes, los cercanos incluso se alimentaron de su jefe caído, y era Samuel el que sacaba la casta y exigía el esclarecimiento y no las sombras que todavía cubren el magnicidio de Luis Donaldo.
Seguro que Palma hizo algo, ya público o privado para tener presente a su jefe. Y algo que no podemos dejar de comentar: ¿Por qué desaprovechar la calidad, vertebración y origen de Samuel Palma César en el proceso que agitadamente cierran los priistas de Morelos? Así como Colosio hizo amigos como Samuel, éste también los tiene.
Rabín y lo que le dejen
El diputado local Rabindranath Salazar Solorio era, al principio de este trienio, uno de los contendientes más serios a la nominación gubernamental. La logró Graco Ramírez. Luego se veía natural que fuera en el primer lugar de la fórmula al Senado, que posteriormente la manejaron para su compañero de bancada Fidel Demédicis y hoy, todo lo indica, quedará en manos de Juan Salgado Brito.
En tanto, Jiutepec, reducto del rabinismo, es lo que queda al también contador público. Así, su primo Arturo Flores Solorio será candidato en el sexto distrito, uno de sus hermanos va como regidor plurinominal –de los que entran—y estudian si Miguel Rabadán, el todavía presidente municipal va en la tercera pluri del Congreso Local o termina su periodo. Esto último porque valoran que ganando el PRD un distrito de mayoría, sólo entrarían dos en la lista.
A esperar en qué quedan.