En la Ciudad de México fue aún peor, y para mi mala suerte, me encontraba en Santa Fe por razones de trabajo el martes pasado, cuando a las 4:00 de la tarde la temperatura bajó a 8°C y estaba lloviendo fuertemente. Lo único que tenía en mente era regresar a Cuernavaca lo más pronto posible. Sin embargo, como todos ustedes deben saber, el camino de Santa Fe a Cuernavaca es largo y complicado... y con lluvia, aún peor.
La lluvia inesperada en Morelos, sobre todo por la cantidad y el frío que la acompañó, fue buena, desde mi punto de vista. En el norte del país, que sufre actualmente una terrible sequía, ha caído algo de lluvia pero se necesita mucho más para lograr nuevos cultivos y cosechas. Se dice que lo peor de la sequía está por venir, desafortunadamente, con lo que la crisis en los sectores agrícola y ganadero se agudizará.
Al parecer las precipitaciones han sido causadas por la nubosidad ocasionada por la marcada entrada de humedad proveniente del Océano Pacífico y una masa fría. Se trata del frente frío número 33 que llegó a nuestro país el sábado pasado y que provocó las lluvias moderadas que experimentamos, así como temperaturas bajas en casi todo el país. En las zonas montañosas cayó nieve y aunque pueda parecernos algo romántico ver el paisaje cubierto de blanco, el impacto es severo para las personas que viven en casas humildes y que no tienen cobijas suficientes. Cuando no sale para nada el sol, caso que nos pasó este último fin de semana, no sentimos calor ni siquiera durante el día. Hay que estar pendientes de nuestros vecinos y asegurar que nadie sufra demasiado por el frío.
Desde ciertos puntos de Cuernavaca, o mientras uno viaja por la autopista desde Cuernavaca hacia la Ciudad de México, es posible ver los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl, ambos cubiertos de nieve. Es una vista privilegiada porque son bellos, impactantes, inmensos y majestuosos. Ver la nieve de tan cerca nos recuerda la enorme cantidad de nieve que ha caído en Europa, que ha causado terribles problemas sobre todo por las muy bajas temperaturas. Han muerto numerosas personas, las escuelas han tenido que cerrar, muchas casas están casi enterradas bajo la nieve, el transporte ha sido interrumpido, los ríos están congelados y muchas empresas han permanecido cerradas porque la nieve impide la llegada de sus empleados.
Para los turistas que visitan México, una gran atracción es nuestro maravilloso clima que ofrece días soleados para disfrutar al máximo las costas y las bellas playas, entre muchos otros destinos. Llegar a México durante estos últimos días de frío ha sido algo frustrante para cualquier visitante, sobre todo porque no ha salido el sol, lo cual es algo extraño y francamente decepcionante. Tengo de visita actualmente a cinco amigos; aunque dejaron atrás temperaturas de menos -5°C en Inglaterra, llegar aquí y no ver el sol ha sido una lástima. Pero lo importante es tomar las cosas con calma y con filosofía y disfrutar todo lo demás que México les ofrece, sin importar que no salga el sol. La verdad es que el mundo está cambiando: el cambio climático altera las temperaturas y ya no hay ninguna garantía de que haga calor o de que llueva...
Sin duda el clima juega también con nuestras emociones y nuestros planes. Un viaje a México para aguantar el largo invierno europeo es importante para levantar el espíritu y sentirse bien. De todos modos, las temperaturas aquí son más soportables que las de Europa. Hay que adaptarse al mundo, aceptar el reto de vivir con estos cambios y abrirse a las nuevas experiencias.
Estoy muy contenta de tener a mis amigos de visita. Las amistades son muy importantes, sobre todo en este Día de San Valentín. Disfrutamos la convivencia, compartimos la mesa, platicamos mucho y tratamos de cubrir todo lo que queremos decirnos unos a otros. Un tema capital que siempre sale a relucir es el del cambio climático; es algo que vivimos todos no importa dónde estemos. Es nuestra realidad ahora. Es importante también compartir nuestras preocupaciones por la Tierra y ésta es la razón por la cual escribo esta columna. Cuídense mucho del frío. Ya pronto nos estaremos quejando del calor...