Lo que se invierte en ciencia se convierte en grandes beneficios no sólo económicos, sino sociales, que por lo mismo trascienden al ámbito en que originalmente se aplica ese dinero.
La protesta del sábado es en solidaridad con un movimiento e alcance mundial a favor e incrementar el gasto público en ese sector.
Sin embargo, en México y en Morelos existe el enrome riesgo de que esa inconformidad pase desapercibida, ya que el aparato gubernamental no labora ese día.
Esperemos que el efecto mediático logre superar ese obstáculo y los fines que se buscan puedan lograrse, sobre todo en Morelos, donde gracias a la ciencia y a la tecnología se reciben millonarios recursos, cuya mengua afecta ya a una estructura construida a través de décadas y enormes sacrificios.
