Pero lo destacado del caso es que -como señala la nota respectiva, que se publica en la edición de hoy- la ex regidora incurrió en falsedad de declaración ante una autoridad, por lo que puede ser sujeta de una acción penal, aunque acusarla está en manos del cabildo de Zacatepec.
Eso quiere decir que si el alcalde, los regidores y la síndico deciden no actuar en contra de ella, quedará impune a pesar de las pruebas de que incurrió en un delito.
La responsabilidad sobre los integrantes del cabildo citado es enorme, pues es posible que marquen un precedente enorme o sumen a su currículum la etiqueta de complicidad.