Se requiere más información en torno al caso de la asignación a un particular del predio que ocupa la unidad deportiva Flores Magón, un sitio de gran importancia para las colonias aledañas y que funciona como tal desde hace décadas.
El hecho de que el particular al que un juzgado federal le adjudicó esa inmueble sea un ex alto funcionario del gobierno anterior agrega elementos de sospecha a la historia, ya que el predio se expropió desde 1978 para el fin al que hoy se le destina.
Sin embargo, habrá que esperar a que todos los documentos sobre el caso se exhiban para tratar de entender cómo es que un espacio público de esa importancia ha pasado a ser de un particular que alega derechos desde una fecha más reciente que la existencia de la misma unidad deportiva.