Resulta muy grave la afirmación del fiscal de que en Morelos los homicidios no se investigan para esclarecerlos y atrapar a quien los comete, sino que sólo se actúa en casos relevantes.
Pese a que se trata de un delito grave, el peor que puede cometerse, la Fiscalía ha dejado de perseguirlo y deja en la impunidad a quienes incurren en ese crimen.
La limitación de recursos es el pretexto para una falta de acción de esa naturaleza, pero durante el sexenio anterior –cuando fue nombrado-el funcionario no se quejó ni hizo públicas las causas que hoy alega.
Como sea, la situación que se vive en la Fiscalía es grave y perjudica a toda la sociedad morelense.
