El funcionario federal con más participación en el proceso de rescate de las universidades públicas endeudadas vino ayer a Morelos y sentenció que la Universidad Autónoma del estado de Morelos (UAEM) puede obtener los recursos necesarios para sanear su déficit financiero, siempre y cuando realice cambios estructurales, lo que implica la necesaria colaboración de los sindicatos y del gobierno estatal.
La representación de los trabajadores académicos ha mostrado su disposición a cooperar en el difícil proceso, pero ha sido el sindicato que agrupa a los trabajadores administrativos el que se ha negado a asumir el panorama financiero que vive la UAEM.
El gobierno federal no evaluará al sindicato, sino a la universidad en su conjunto, por lo que si la participación de los trabajadores en los mecanismos de saneamiento del déficit no mejora, estamos ante la posibilidad de que unos centenares de afiliados comprometan la viabilidad de una institución que agrupa a más de 45 mil almas.
Quedan pocas semanas para que se tomen decisiones de enorme trascendencia.