Los 16 municipios que no entregaron a tiempo su programa operativo de prevención de lluvias han puesto en peligro a parte de su población que vive en zonas de riesgo susceptibles de sufrir inundaciones o deslaves.
Eso es una violación a la ley que merece ser sancionada si tiene consecuencias patrimoniales o por la pérdida de vidas.
El cambio climático ha incrementado la furia de los fenómenos naturales, por lo que la prevención es más necesaria que nunca, sobre todo porque el esquema de las lluvias en forma general puede predecirse y anticiparse a las consecuencias.
Las leyes permiten castigar las omisiones, sobre todo cuando tienen que ver con temas tan delicados.