La anunciada reapertura del jardín etnobotánico ubicado en Cuernavaca y a cargo del Instituto Nacional de Antropología e Historia es una señal de que la reactivación del estado de Morelos avanza para superar los efectos adversos del temblor del 19 de septiembre de 2017 pero también de la pandemia.
Aunque prácticamente toda la entidad sufrió en mayor o menor medida los efectos devastadores del mencionado sismo, los mayores daños se concentraron en pocos lugares, como aquellos que disponen de un patrimonio histórico que data del inicio de la conquista española.
Esos inmuebles fueron notablemente afectados y su restitución es compleja y además se retrasó por la pandemia.
Pero hay avances, como la reapertura a la que se hace referencia. Eso, más el trabajo de todos los sectores productivos, nos acercan poco a poco a los niveles económicos que se habían alcanzado hasta que la Naturaleza empezó su demostración de fuerza.