Aunque los ayuntamientos requieren de mayores recursos económicos, los contribuyentes de Morelos enfrentan la mayor crisis económica en décadas y sus ingresos aún no recuperan los niveles anteriores a la pandemia, por lo que aumentar impuestos o derechos solo causará estragos o una nueva huida hacia la informalidad.
Definitivamente las nuevas autoridades municipales por lo general encontraron no solo las arcas vacías, sino enormes pasivos a corto plazo que deben atender, pero no a cualquier precio.
Quizá incrementar la base de contribuyentes sea una salida más justa que hacer pesar una mayor carga sobre quienes sí han cumplido sus obligaciones.
Los legisladores deben valorar todo el escenario y no tomar decisiones a la ligera en algo tan importante como la economía de los ciudadanos.
