La llegada del periodo festivo relacionado con la temporada de fieles difuntos genera desde ayer una gran movilización de personas que buscan destinados turísticos para descansar y divertirse.
Morelos tiene de nuevo la oportunidad de interceptar a los cientos de miles de viajeros que en primera opción contemplan destinos de playa, pero que de encontrar opciones agradables y adecuadas pueden modificar sus itinerarios.
La derrama económica que de por sí dejan estos días es considerable pero puede serlo más si todos los sectores de la población trabajamos en equipo.
La pandemia tiene que quedar atrás no solo en su aspecto sanitario sino también económico y ahora tenemos una nueva oportunidad.
Juntos debemos aprovecharla y poner las bases de lo que hace no mucho fue una industria turística pujante y competitiva.