El reporte oficial señala que el regreso a clases en las escuelas públicas y privadas se llevó a cabo de manera normal, sin incidentes, luego de un largo descanso que comenzó el viernes pasado.
Una parte no precisada de los padres de familia han señalado su inconformidad por la pérdida de clases y el retraso que eso acarreará en los educandos, de por sí afectados por el cierre de las escuelas por la pandemia.
Las limitaciones impuestas por el coronavirus impidieron por dos años el cumplimiento a cabalidad de los programas de estudio y el tiempo y la enseñanza perdida aún no se recupera, lo que justifica la preocupación.
La responsabilidad de reponer los conocimientos que no se impartieron debido a los asuetos es de los profesores, pero también de los padres de familia, que desde los hogares deben coadyuvar a la causa, de tal manera que se justifique el larguísimo fin de semana que recién concluyó.