La actitud de Tania Valentina Rodríguez Ruiz no es ajena a la de muchos de sus homólogos y causa la misma pena.
Ayer, en un alarde de prepotencia, la legisladora plurinominal -es decir, que nadie la eligió, sino que llegó al cargo gracias a la permisividad de las leyes electorales- ordenó al personal del Congreso que desalojara a los reporteros que no hacían caso a sus palabras durante una conferencia de prensa.
Toda la operación del Congreso y los desconocidos pero enormes ingresos de los diputados provienen de los recursos públicos.
Sin embargo, Rodríguez Ruiz (simplemente Tania Valentina, como se promueve) tiene una visión patrimonialista del presupuesto y de los recursos que el Poder Legislativo tiene a su disposición y considera que hasta quienes trabajan en los medios de comunicación están a sus órdenes.
Es obvio que alguien le tiene que explicar a ella y a sus Por lo pronto, el gremio periodístico merece (pero no espera) una amplia disculpa.