El fin de semana largo trae una pausa en medio de un complejo periodo de tensiones a consecuencia de los riesgos perceptibles por la falta de contrapesos en el poder. El país no ha comulgado con sistemas políticos como los que comienza a vivir, en un momento de dimensiones históricas.
El receso también trae consigo la inquietud por la seguridad y el llamado al civismo en los festejos patrios. Morelos es un destino privilegiado en materia turística, y el visitante siempre es bien recibido en una tierra que ofrece múltiples atractivos para garantizarle una estancia placentera.
A los esfuerzos institucionales por brindar seguridad, debe unirse la disposición ciudadana por abonar a condiciones de paz y tranquilidad, en medio de un clima político enrarecido.
