Por segunda ocasión en los poco menos de cuatro meses de su gobierno, la gobernadora Margarita González Saravia tuvo un gesto hacia la UAEM, esta vez, al autorizar el adelanto de la ministración estatal y con ello resolver un conflicto que parecía crecer derivado de la falta de pago de la catorcena a los trabajadores universitarios.
La decisión de la mandataria fue reconocida por la propia casa de estudios, que además destacó la sensibilidad y solidaridad de la titular del Ejecutivo a través de un oficio enviado a sus directores para informarles que ya contaban con los recursos necesarios para iniciar ayer mismo la dispersión de la nómina.
Este episodio debe tomarse en cuenta para prever futuras contingencias. El llamado a resolver y garantizar el tema de la suficiencia presupuestal realizado por el secretario general del SITAUAEM, debe ser considerado, pues es un “foco rojo” mantener abierto un problema latente en un tema tan sensible como es la educación.