Entre la desgracia que han significado los incendios forestales en Morelos hay algunas buenas noticias: se trata del anuncio de mejoras para los equipos de emergencia que atienden estas contingencias, que por muchos años han estado en el olvido.
Como lo anunció el secretario de Desarrollo Sustentable, Alan Dupré, el Centro de Emergencias y Contingencias Ambientales, al que pertenecen los combatientes forestales, recibirá una inversión histórica en equipamiento que ayudará al personal a desempeñar en mejores condiciones su trabajo, en el cual –incluso– ponen en riesgo su vida.
Entre las medidas contemplan también un incremento al sueldo de los llamados “Zacatuches”, que ayudará a mejorar la calidad de vida de sus familias. El otorgamiento de becas para sus hijos para aprender idiomas y programas de cómputo también abonan al reconocimiento de su gran labor.
Además de lo anterior, hay otro aspecto relevante: se empieza a poner por delante la visión de la prevención y el estar preparados para enfrentar este problema, que cada año afecta a la entidad.
Migrar de la costumbre a la corresponsabilidad sería el mejor legado del actual gobierno, y bien vale la pena hacer el esfuerzo, pues cada peso que se destine a ello será bien invertido.