Policías y sus vehículos estuvieron varias horas en desuso, pese a que la suma de salarios de la gente que se movilizó totaliza más de cien mil pesos, si es que ganan lo que oficialmente se asegura que reciben. Y aunque no ganaran eso, la vigilancia que se retiró de esos lugares seguramente propició que se cometieran más delitos. Y eso representa un elevado costo para la sociedad.
Para colmo, la causa principal de la comparecencia no se cumplió: pese a que son recursos públicos, el Comisionado de Seguridad se negó a precisar el uso del presupuesto que ha estado bajo su manejo.
Por donde se le mire, fue una jornada de pérdida para la población.