La Fiscalía General del Estado de Morelos ha sido omisa ante las demandas sociales de que se lleve a cabo el proceso para obtener los rasgos de identificación de los cuerpos, ante la posibilidad de que algunos de los cientos de desaparecidos en la guerra contra el narcotráfico pudiera ser localizado en ese lugar.
La insensibilidad es más que evidente, porque parte de la intervención que la autoridad se niega a hacer es para devolver un poco de dignidad a las personas que fueron sepultadas como si no hubieran sido humanos.