No se puede abordar el tema del acoso, ya sea sexual, laboral, o simplemente sobre feminismo y machismo sin el riesgo de que se considere un artículo en defensa del género y en contra de las mujeres, pero asumiremos el riesgo.
Admitimos que durante décadas las mujeres sufrieron las consecuencias de vivir en un régimen patriarcal y machista. No hace mucho todavía se consideraba inútil darle estudios a las hijas si se dedicarían al hogar, y era mal visto que una mujer ganara más que un varón. El ascenso de una fémina inmediatamente generaba la curiosidad de preguntar qué varón la estaba impulsando y en automático se relacionaba con una cuestión sexual.
Los tiempos han cambiado y qué bueno. Hoy hay una verdadera revolución en ese tema y las mujeres se están ganando su derecho a ser respetadas literalmente a golpes. Cada quien tendrá su propio punto de vista sobre las formas, pero en el fondo todos estamos de acuerdo en que la igualdad entre hombres y mujeres debe ser un hecho y no sólo palabras escritas. De la violencia ya ni hablamos, es totalmente inaceptable.
Envalentonadas por la corriente anti-machista generada por los últimos acontecimientos, se han cometido injusticias. Hoy ventilaremos aquí un caso en el que consideramos que están pagando “justos por pecadores”.
El pasado 12 de marzo, en el marco de la comparecencia de la secretaria de Desarrollo Agropecuario, se dio un incidente que involucró al director administrativo de esa dependencia, Hipólito Reyes Guzmán.
Los que presenciaron la escena vieron a una MUJER acompañada de un adolescente en silla de ruedas “increpando” a un HOMBRE -funcionario de gobierno-, quien prácticamente se quedó callado (y el que calla otorga). La imagen dice más que mil palabras.
Sin embargo, lo peor que puede uno hacer es dejarse llevar por una imagen sin conocer lo que hay detrás de ella.
Por principio de cuentas, la señora que se ve en el video afirma que gana mil 500 pesos. Y tiene razón, pero lo que no dice es que gana eso porque le descuentan dos créditos que está pagando al Instituto de Crédito para los Trabajadores al Servicio del Estado, beneficios que quizás no hubiera obtenido de no ser porque cuando los tramitó era dirigente del Sindicato de Trabajadores del Poder Ejecutivo, organismo que por cierto la expulsó.
Tras varios años de juicio el gobierno del estado la reinstaló, y el único lugar que le encontró fue en la Sedagro. Ahí la conoció Hipólito Reyes, quien la apoyó para que a partir del 28 de octubre de 2019 estuviera comisionada con Jesús Chávez Ramírez, presidente del Comisariado Ejidal de Cuautla, con el propósito de que atendiera a los productores derivado de la instrumentación del Programa de Concurrencia con las Entidades Federativas de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, para el ejercicio 2019, el cual cerró el 31 de diciembre de 2019 y la fecha límite para la entrega de la documentación soporte de los trámites de los beneficiarios fue el 31 de enero de 2020.
“Durante el tiempo que la señora Irma Hernández estuvo trabajando en Cuautla traté de apoyarla con sus demás peticiones, el 28 de octubre de 2019, me reuní con la Lic. Denia Torres Rivera, Secretaria General del Sindicato Único de Trabajadores del Poder Ejecutivo y Entidades Paraestatales y del Estado de Morelos para solicitarle su apoyo, a efecto de que le diera a la señora Irma una plaza sindicalizada con un ingreso mayor, quien me informó que no era procedente mi solicitud dado que la señora Irma Hernández Solís no es sindicalizada, en virtud de que fue expulsada del sindicato citado”, contestó Hipólito a la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos después de que Irma lo denunció.
Explica que derivado de que concluyó el Programa de Concurrencia con las Entidades Federativas de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, para el ejercicio 2019, para el cual fue comisionada la señora Irma Hernández Solís, el 24 de enero de 2020 se le informó mediante oficio número SDA/DGA/069/2020 que quedaba concluida su comisión que venía desempeñando y que tenía que presentarse a la Unidad de enlace financiero Administrativo de la SEDAGRO a partir del 27 de enero de este año, en horario laboral.
“El 27 de enero de 2020, a las 10 horas, la señora Irma me solicitó que nuevamente la comisionara a Cuautla, expresando que tiene a su hijo con discapacidad, a lo cual le comenté que el motivo de la comisión anterior se extinguió, a lo que ella me contestó que si no la comisionaba presentaría una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos y ante todos los medios de comunicación por discriminación y acoso laboral”.
Y lo cumplió.
No meteríamos las manos al fuego por Hipólito Reyes, a quien conocemos desde hace algunos años, pero sí podemos dar referencias de su trabajo y de lo que ha hecho por la comunidad Down, ya que tiene un hijo con ese síndrome al que ha logrado sacar adelante.
También tenemos buenas referencias de lo combativa que fue Irma en su papel como dirigente sindical, y de su esfuerzo por sacar adelante a su hijo al igual que muchas mujeres en ésta entidad. Pero consideramos que en ésta ocasión equivocó la forma, pues nos consta que Reyes Guzmán trató de ayudarla hablando con la directora del ICTSEM, Fabiola Urióstegui, para que los descuentos fueran más asequibles.
Por otro lado, y tal como lo mencionamos en la columna del 13 de marzo, hubo “mano negra” de algunos diputados para echarle a perder la comparecencia a Margarita Galeana, y dentro de ese “complot” se incluyó el permiso para que la señora Irma pudiera ingresar al recinto legislativo y hacerle “el show” a Hipólito, con la presencia de un buen número de reporteros.
En este tipo de casos, en el que el género masculino actualmente “por defaul” queda como victimario, sólo queda la reputación que cada persona haya construido a lo largo de toda una vida, y es el caso de Hipólito.
El video de #LadyManoseada (donde una señora enojada porque un hombre la grabó por haber dejado a sus hijos en un Oxxo, lo persigue con frases amenazantes y comienza a gritar que él la “manoseó”) nos deja en claro que también hay mujeres que pueden utilizar la corriente pro-feminista que actualmente permea en la sociedad mexicana, para obtener beneficios laborales o para venganzas personales.
HASTA MAÑANA.