La publicación de la esperada “convocatoria del Comité Ejecutivo Nacional de Morena para la definición de la coordinación de defensa de la transformación en Morelos” hizo suponer en un principio que las reglas dejarían como “damnificados” a varios aspirantes, sobre todo por la participación de los 50 consejeros estatales elegidos en agosto del año pasado.
Según la mencionada convocatoria, en una primera etapa podrán inscribirse TODOS Y TODAS a través de una plataforma digital. Se entiende que la Comisión Nacional de Elecciones hará la primera “rasurada” discrecional de aspirantes, puesto que valorará y calificará los perfiles, con la finalidad de dar a conocer las solicitudes aprobadas.
La segunda “rasurada” sería la del Consejo Estatal, al que instruyen a pronunciarse a favor de CUATRO aspirantes, dos hombres y dos mujeres. Hay 50 consejeros en total, por lo que se requieren entre 12 y 13 votos para garantizar el visto bueno del Consejo. En esta etapa tendrán ventaja los aspirantes que cuentan con consejeros afines en el órgano estatal. Es decir, aquí no pesará la inversión en espectaculares y redes sociales, sino la militancia morenista, que fue la que se movilizó el día de la elección de consejeros.
Esta etapa del consejo será de negociación en virtud de que no todos ni todas tienen presencia en el Consejo, por lo que en días próximos las veremos disputándose los votos de los consejeros. Por otro lado, los aspirantes Rabindranath Salazar, Rodrigo Arredondo, Rafael Reyes y Juan Ángel Flores tienen canicas en el Consejo, pero tendrán que valorar si les alcanza para obtener un lugar, o si ceden sus votos a alguna de las damas que se vean beneficiadas por la cuota de género.
La tercera etapa será la encuesta, en donde tendrá peso el nivel de conocimiento entre la ciudadanía, así como la opinión sobre el desempeño de cada aspirante. Cabe señalar que la convocatoria señala que, en todo momento, la Comisión Nacional de Elecciones podrá incluir perfiles en las encuestas.
Esto abre la puerta para aspirantes externos, que no tienen presencia en el Consejo Estatal. Finalmente, el presidente de MORENA, Mario Delgado, informó que de las nueve entidades federativas que estarán en juego en 2024, es posible que cinco candidaturas sean para hombres y cuatro para mujeres, puesto que en las postulaciones de años anteriores hay mayoría de mujeres.
Ayer por la mañana, comenzó a circular un audio (nadie sabe de dónde salió, pero de que es la voz de Mario Delgado, eso que ni qué), en el que dice textualmente:
“Los Consejos van a dar dos nombres: dos nombres de hombres y dos de mujeres. Y la Comisión de elecciones podrá en todo momento incluir a más perfiles para la encuesta final. Las propuestas de los consejos son propuestas, son sugerencias a la Comisión. Repito: los nombres que den los Consejos estatales (4 nombres: 2 hombres y 2 mujeres) son propuestas que la comisión de elecciones puede o no considerar, pero, además, tiene la facultad de incluir más nombres, esto es para evitar cualquier tipo de sectarismo”.
Los registros de los aspirantes se llevarán a cabo entre el 25 y 26 de septiembre. Los consejos estatales de Morena tendrán hasta el 28 para valorar y proponer a la Comisión Nacional de Elecciones los perfiles de dos mujeres y dos hombres, de entre los inscritos. Sin embargo, esos cuatro perfiles no son ni definitivos ni únicos, pues la Comisión tiene la facultad de “… en todo momento, determinar la inclusión de perfiles en las encuestas…”, sin un límite para ello.
Eso significa que el día 30 de septiembre deberán ser publicados los nombres de las personas a quienes se haya aceptado su registro y que podrían ser desde ninguno —cuestión mucho muy remota— pero que no deja de ser una posibilidad teórica, hasta el número que decida la Comisión incluir. Digamos que, si fueran veinte o treinta los aceptados, los veinte o treinta serían publicados. Y eso lo determina en forma exclusiva la Comisión Nacional.
Ya en una siguiente etapa la Comisión Nacional determinará quiénes son las personas que pasan a la fase de las encuestas y también si es necesario hacer una primera encuesta de reconocimiento para, finalmente, seleccionar a tres mujeres y tres hombres que pasarían a la encuesta de preferencias, o sea la encuesta final, aunque no definitoria.
Una vez con los resultados de las encuestas, la misma Comisión Nacional decidirá quiénes encabezarán las candidaturas en cada una de las nueve entidades federativas.
Como se puede advertir, las posibilidades dan tanto para una candidatura de unidad y hasta para la realización de encuestas que aporten elementos a la decisión que tome la Comisión Nacional.
Es decir, no es un proceso de elección de coordinador estatal y por consecuencia de candidato a gobernador, sino, finalmente, es una designación hecha por la cúpula, definitiva e inatacable, que cierra el paso a cualquier tipo de inconformidad.
Serán decisiones cupulares porque ni los comités o consejos estatales tienen voz ni voto efectivos, y tampoco los partidos aliados, PT y Verde, tienen posibilidad de inconformarse.
Aquí, cobra relevancia una frase que este columnista ha venido diciendo desde hace años: “Los designios de AMLO son inescrutables e irrebatibles”.
Por otra parte, llama la atención lo siguiente:
“Queda estrictamente prohibido que quienes son aspirantes realicen acusaciones públicas contra el partido, sus órganos de Dirección u otros aspirantes o protagonistas, o en su caso, cometan actos de violencia física contra otros miembros o el patrimonio del partido. La falta a esta disposición será sancionada con la cancelación del registro de aspirante al cargo interno que pretende ocupar y se dará vista a la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia.
Y este otro párrafo:
Queda prohibido el uso de campañas dispendiosas y anuncios espectaculares; uso de recursos públicos de cualquier naturaleza; intervención de servidores públicos en favor o en contra de participantes; la utilización de programas sociales, condicionamientos o coacción en favor o en contra de participantes. Quienes hayan visto publicidad de su persona en cualquier forma deberán deslindarse pública, política, financiera y jurídicamente, de cualquier tipo de campaña dispendiosa (espectaculares, pinta de bardas, lonas, etc.). También para llamar enérgicamente a sus simpatizantes a frenar cualquier denuesto y descalificación entre compañeros en redes sociales que pudieran rayar en la guerra sucia que desde siempre hemos combatido y denunciado. Cabe recordar que este tipo de prácticas suelen ser inducidas o auspiciadas por nuestros adversarios con el propósito de dividirnos, debilitarnos o desprestigiarnos”.
Es decir, que las campañas publicitarias y guerra sucia sí pueden hacerse, siempre y cuando haya una manifestación por escrito en el que el o la aspirante SE DESLINDE de dichas publicaciones y “llame enérgicamente” (habría que ver qué es para Mario Delgado un llamado enérgico) a sus simpatizantes a no denostar a los competidores.
HASTA MAÑANA.