Aún no concluía la jornada electoral, pero los dirigentes del blanquiazul en dicha entidad y varios a nivel nacional acusaron al PRI de haberse aliado con el crimen organizado en alrededor de 40 municipios a fin de conseguir el triunfo de la coalición encabezada por Fausto Vallejo, cuyo triunfo será objetado ante tribunales. Ahí es donde los panistas quieren encontrar la ansiada victoria. Faltaba más. Otro hubiera sido el escenario si la famosa “Cocoa” gana el proceso. Desde luego, el fracaso de la fémina fue una bofetada a Felipe Calderón Hinojosa, quien obsequió el respaldo absoluto del gobierno federal a su consanguínea. Propios y extraños constataron el gigantesco derroche de los recursos públicos.
Sin embargo, el delegado del Comité Ejecutivo Nacional del PRI en Michoacán, Fernando Moreno Peña, rechazó ayer que la delincuencia organizada haya influido en los resultados de los comicios en esa entidad. En entrevista, luego de que el PAN y el PRD acusaron que “el narcotráfico operó a favor del tricolor”, afirmó que “en los municipios de tierra caliente, donde presuntamente hay presencia del crimen, la suma de votos de esos dos partidos es superior al PRI”. En ese sentido, el ex gobernador de Colima deslindó a su partido de cualquier vínculo con los presuntos grupos de hombres armados “que nadie vio”.
Empero, el prometer no empobrece, ni tampoco difamar y tergiversar la realidad, tal como ayer, otra vez, lo pretendió hacer el presidente del Comité Directivo Estatal del PAN-Morelos, Germán Castañón Galaviz, quien citó a conferencia de prensa para reiterar la acusación: “No se descarta que las células y grupos delincuenciales hayan utilizado como laboratorio político a Michoacán”. Y agregó que “ya se había visto en otros procesos, como en Veracruz, la presencia de grupos paramilitares dedicados a la coacción del voto a favor de los candidatos priístas”. Todo, amables lectores, sin presentar pruebas de nada que, de llegar a existir, deberían ser puestas a disposición de la procuradora general de la República, Maricela Morales, quien ayer reiteró que ninguno de sus subalternos incurrirá en actos de corrupción. Así las cosas, la cúpula nacional panista aprovecharía la coyuntura para propinarle al PRI el más duro golpe rumbo a las elecciones presidenciales, amén de que contribuiría a la debacle de todo el sistema político nacional. Imaginen ustedes: por fin alguien demostraría que los partidos, durante épocas todavía indeterminadas por la historia, estuvieron coaligados con el crimen organizado para conseguir el poder. ¡La confirmación del estado fallido en su máxima expresión! Lamentablemente la situación no pasa de un simple forcejeo político, donde algunos advenedizos –verbigracia Germán Castañón Galaviz- siempre pretenden sacar raja. En fin.
Cambiando de tema he de referirme al intenso ritmo de trabajo demostrado por la profesora María Eugenia Ocampo Bedolla, nueva secretaria general de la Sección 19 del SNTE en Morelos. La fémina, junto con su comité ejecutivo integrado por alrededor de 52 maestros, se reunió ayer con el gobernador Marco Adame Castillo teniendo como escenario la Casa Morelos. Bastante prudente, la lideresa magisterial ofreció al mandatario “un diálogo permanente, respetuoso y cordial”, pero patentizó que la nueva representación sindical abonará con su mejor esfuerzo para mejorar la calidad educativa a nivel estatal siempre y cuando exista reciprocidad del gobierno estatal. Solicitó, pues, el restablecimiento de la mesa del diálogo con la administración adamista y concluir asuntos pendientes en torno a la agenda laboral, prestacional y profesional. Observaban la escena el secretario de Educación del Estado, Alejandro Pacheco Gómez, y el director general del IEBEM, Felipe Sedano Reynoso. Ocampo Bedolla fue a su vez acompañada por el delegado del CEN del SNTE, Moisés Armenta Vega, quien reconoció públicamente el compromiso del gobernador Adame con la educación y la atención que ha otorgado a los planteamientos del magisterio. Por otro lado, Armenta lamentó que en el presupuesto de egresos aprobado por la Cámara de Diputados el pasado martes, se haya destinado un incremento mínimo para la educación hacia el 2012, pero al dirigirse de nuevo al gobernador señaló que “los maestros confían en que aquí se continuará haciendo un esfuerzo extraordinario, buscándose los recursos para atender las necesidades existentes”. En resumen: el encuentro fue cordial, pero frente a una delgada línea que podría ser vulnerada una vez que las dos partes (SNTE y gobierno estatal) se adentren en el proceso electoral del año próximo. A ver.
Finalmente diré que la coalición de partidos de izquierda (PRD-PT-Movimiento Ciudadano) para las elecciones concurrentes de 2012 en Morelos probablemente se denominará “Movimiento Progresista”, que es una propuesta de Andrés Manuel López Obrador. Mientras tanto, la coalición PRI-PVEM-Panal se llamará “Compromiso por México”. Respecto al caso de la candidatura de las “izquierdas” locales, el problema será cumplirle sus caprichos al senador Graco Ramírez, quien ansía que el aspirante gubernamental emerja de una encuesta, misma que no ganaría ninguno de los más importantes líderes del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena). Y en torno a Acción Nacional, Marco Adame Castillo rompió el cerco colocado por el senador Adrián Rivera Pérez a otros posibles precandidatos. Al secretario de Finanzas y Planeación, Alejandro Villarreal Gasca, y al de Desarrollo Urbano y Obras Públicas, Demetrio Román Isidoro, se sumó anteayer el de Salud, Víctor Caballero Solano. El problema para los tres funcionarios adamistas es que les falta un activismo abierto a fin de posicionarse adecuadamente en las encuestas.