Para entonces destacaba un movimiento de presión: la huelga de hambre en la puerta principal del Palacio de Gobierno protagonizada por cinco presuntas trabajadoras adheridas al Sinatrec, misma que resultó una farsa pues las mujeres ingerían alimentos. Como era de esperarse, el plantón fue desalojado la madrugada del jueves 14 de agosto. Ese mismo día, también en Palacio, el subsecretario de Gobierno, Omar Darío de Lassé Cañas, declaró que había interpuesto ante la Fiscalía General una denuncia contra dirigentes del Sinatrec por el secuestro agravado de que fue objeto durante una manifestación de ese gremio el 30 de julio. Los hechos ocurrieron en Jonacatepec, donde el funcionario fue retenido y liberado horas más tarde luego de “garantizar” una audiencia de aquellos líderes con el titular del Poder Ejecutivo y gestionar los mentados contratos de obra. Tengo entendido que todo quedó registrado en un acta notarial.
2.- Así las cosas, ayer volvió a demostrarse el cumplimiento de la siguiente expresión atribuida a Benito Juárez: “A los amigos, justicia y gracia. A los enemigos, la ley a secas”. Ni duda cabe que el Sinatrec es enemigo del gobierno morelense, lo cual también era previsible, pues dicho sindicato sienta sus reales donde hay gobiernos débiles o inclinados a confabularse con su máximo dirigente, Eduardo Santillana Carpinteiro, para realizar pingües negocios. Sin embargo, aquí se topó con pared y ello quedó demostrado este domingo, cuando Luis Alejo Rosales, secretario del Trabajo y Conflictos del Comité Nacional del Sinatrec y dirigente de esa agrupación en Morelos, fue detenido y encarcelado con relación a los hechos denunciados por De Lassé Cañas.
3.- La audiencia de vinculación a proceso comenzó ayer a las 14:00 horas en un juzgado oral y tengo entendido que al señor Alejo Rosales le fue aplicada la prisión preventiva, ya que la Fiscalía General tuvo extremo cuidado para plantear la formulación de imputación y demostrar que el subsecretario de Gobierno fue secuestrado y sometido mediante los condicionamientos que señala la fracción II del artículo 140 del Código Penal. Ahí se establece –entre otras agravantes- que el secuestro surge cuando se impone el cumplimiento de una condición a cualquier persona, particular o autoridad. Conclusión: si la denuncia del subsecretario fue debidamente elaborada, conteniendo suficientes pruebas de cargo; y los procedimientos posteriores bajo responsabilidad de la Fiscalía se encauzaron con suficiente sustento, estaríamos ante un legítimo acto jurídico de carácter penal; pero si la Fiscalía fue utilizada para enviar señales al Sinatrec, según las decisiones asumidas por el gobierno estatal para frenarlo en Morelos, estaríamos ante la criminalización de la protesta, con la utilización del Ministerio Público como instrumento para frenarla. Me parece que en base a las dos vertientes comenzará a debatirse el delicado asunto a partir de hoy. Empero, no debe soslayarse lo fundamental: donde se para el Sinatrec provoca conflictos e incurre en delitos.
4.- Cambiemos de frecuencia. Los diputados de la bancada priista se reunieron ayer para ponerse de acuerdo y nombrar a quien los coordinará en el último año de la 52 legislatura. Buscan tal posición Rosalina Mazari Espín y Juan Carlos Rivera Hernández, quienes en círculos políticos son vistos como representantes de los intereses, respectivamente, de los grupos políticos de Maricela Sánchez y Amado Orihuela, con toda la carga de cosas positivas y negativas que de ambos se comentan siempre. Como era previsible, no salió humo blanco en este cónclave del tricolor porque ninguno de los aspirantes está en el ánimo de ceder, los dos se asumen con méritos y capacidades y estiman que tienen tiempo aún para conseguir que los votos de la bancada de siete legisladores, se inclinen mayoritariamente en su favor. En esta disputa por el poder se afirma que desde el Palacio de Gobierno hay manos que mecen la cuna a favor de uno de los contendientes, pero casi no lo creo.
5.- Al poner en marcha el ciclo escolar, el gobernador Graco Ramírez destacó que la matrícula en educación se incrementó –hasta en diez mil alumnos en el caso de la educación superior- y que se mejorará la operación del Programa Beca Salario a favor de sus 110 mil beneficiarios, de los cuales algunos no pudieron cobrar sus recursos durante todo el año escolar anterior, debido a que en sus comunidades no hay internet ni sucursales bancarias. Sobre la Beca Salario es oportuno recordar cómo el 12 de agosto pasado en el Congreso, en ocasión del Parlamento Juvenil 2014, jóvenes de todos los municipios morelenses que participaron en calidad de Diputados por un día, se trenzaron en un debate intenso sobre los problemas, alcances y posibles cambios que debe sufrir el programa creado para evitar la deserción escolar a falta de recursos económicos. Los jóvenes expusieron, por ejemplo, que un apoyo de 700 pesos, sin que deje de ser importante, no sirve en igual medida para los requerimientos de un estudiante de Cuernavaca que otro de Ayala, por ejemplo, si ambos deben acudir a estudiar al Campus Chamilpa de la UAEM, o que la universalidad del programa es cuestionable porque no considera que hay alumnos de universidades privadas que estudian ahí no por ser pudientes sino porque no tuvieron espacio en las universidades públicas, ni que los morelenses que van a estudiar a la UNAM también requieren apoyo. Me queda claro que el Beca Salario es un programa excelente que ha puesto a Morelos a la vanguardia nacional, pero como todo es perfectible.