Reunido el lunes de la presente semana en la Residencia Oficial con alrededor de 25 delegados federales y el propio Messeguer entre los presentes, el titular del Poder Ejecutivo, además, confirmó que el relevo será Matías Quiroz Medina, actual presidente municipal de Tlaltizapán, quien ya está preparando el arribo de su suplente María Cruz Bastida Muñoz, hoy directora de Educación, Cultura, Recreación y Derechos Humanos del Ayuntamiento. Lo deseable es que el síndico municipal, Felipe Sánchez Solís, no vaya a escuchar el “canto de las sirenas” (o sea aspirar al cargo de alcalde) y acepte el debido cambio institucional.
2.- Durante su encuentro con los representantes federales, a cuyo frente se encontraba Erick Castro Ibarra, delegado de la Secretaría de Gobernación en Morelos, el mandatario morelense patentizó que la marcha de la administración pública estatal se desarrolla en completa sintonía con el proyecto de nación propugnado por el presidente Enrique Peña Nieto. Y la contraparte, en voz de Castro Ibarra, respaldó las reflexiones de Ramírez Garrido Abreu, amén de que refrendó el apoyo del gobierno federal a su gobierno. Conclusión: no existe ninguna estructura paralela de poder integrada por los emisarios de dependencias federales, aunque sí la instrucción desde la Presidencia de la República para redoblar esfuerzos a favor de la ciudadanía morelense en coordinación con el gobierno de Morelos y los 33 ayuntamientos constitucionales. Y si alguno de los delegados federales tiene la intención de buscar un cargo de elección popular rumbo a los comicios de 2015, será preferible que presente voluntariamente su renuncia o de lo contrario será removido. Este mensaje quedó flotando tras la reunión de Graco con los funcionarios del gobierno peñista, entre quienes hay varios con posibilidades de participar en la contienda electoral venidera. A ellos se dirigió el gobernador pidiéndoles equidad y respeto. Al buen entendedor, pocas palabras.
3.- La revelación de que en breve será relevado Jorge Messeguer Guillén ha sido bien recibida entre los partidos de oposición en el Congreso, los cuales durante dos años han señalado al funcionario como el obstáculo principal para que las diversas fuerzas políticas logren mantener comunicación con el gobernador Graco Ramírez. El aún alcalde en funciones de Tlaltizapán, Matías Quiroz Medina, es bien visto por el PRI y el PAN no sólo por sus cualidades en el manejo de la mano izquierda, sino porque a estas alturas casi cualquiera les satisfaría debido a que Messeguer Guillén se les convirtió en una piedra en el zapato desde el principio de la administración, y particularmente en el último año en que se ha promocionado sin rubor como precandidato.
4.- Sobre la eficiencia de Jorge Messeguer, el coordinador de los diputados del PAN, Javier Bolaños Aguilar, ha insistido en señalar que es incapaz y desinteresado para tender puentes entre las bancadas y el titular del Ejecutivo. Los mismos señalamientos han sido hechos por el diputado Isaac Pimentel Rivas, quien fuera coordinador de los priístas en los dos años recientes, hasta agosto pasado. Esta semana ambos han coincidido, también, en que el cambio de funcionarios en el gabinete estatal es sano, y principalmente el que se refiere a la oficina encargada de la política estatal. La apreciación oposicionista sobre el tema podría parecer intrascendente, pero el cambio en la Secretaría de Gobierno es, se entiende, con la intención de mejorar la operación política de la administración graquista, y en ese propósito será importante la relación del Ejecutivo con el Congreso, que es la principal caja de resonancia de los problemas estatales.
5.- Y en torno al cargo de elección popular que habrá de buscar Jorge Messeguer Guillén, según la óptica de quien esto escribe no debería ser la presidencia municipal de Cuernavaca. De entrada, el multicitado personaje tendrá que sortear varios frentes opositores en el Partido de la Revolución Democrática. Ese desgaste, sumado al que ya de por sí tiene acumulado el todavía secretario de Gobierno, lo conducirá debilitado al inminente proceso electoral. Lo mejor para Messeguer sería convertirse en diputado federal plurinominal, para lo cual necesitará el apoyo pleno de Graco Ramírez y la cúpula nacional del PRD. En los años siguientes conseguiría margen de maniobra, con varias opciones para su carrera política a partir de 2018. A ver.
6.- ¿Qué escenario le espera a Matías Quiroz Medina en la Secretaría de Gobierno? Chequen ustedes: según se lo mandata la Ley Orgánica de la Administración Pública del Estado, el secretario de Gobierno debe conducir las relaciones del Poder Ejecutivo con los otros poderes y con los ayuntamientos, así como llevar los asuntos de orden político interno y aquellos que le sean encomendados por el Ejecutivo. Además, el Reglamento Interior de la Secretaría de Gobierno le reitera lo anterior, pero el artículo 8 señala que el titular del ramo deberá ser apoyado por el subsecretario de Gobierno (el actual es Omar Darío de Lassé Cañas) para atender la conducción política y las relaciones con los 33 ayuntamientos, así como también “propiciar la participación de los grupos y sectores de la sociedad y organismos no gubernamentales en los programas y políticas de Gobierno; auxiliar al secretario en la conducción de los asuntos de orden político interno del Estado; mantener la gobernabilidad partiendo de una relación armónica y un constante acercamiento entre el Ejecutivo Estatal y la sociedad morelense, y solicitar por acuerdo del secretario de Gobierno la agenda de los asuntos que pudieran convertirse en conflictos sociales a los secretarios de despacho y sus organismos”. Matías Quiroz Medina, entre otras cosas, ya fue presidente municipal de Tlaltizapán en el trienio 2000-2003 y diputado local de 2006 a 2009. En el Congreso coordinó el grupo parlamentario del PRD teniendo como compañera a Lucía Meza Guzmán, hoy presidenta de la Mesa Directiva del Congreso. En 2009, Quiroz Medina buscó ser diputado federal por el IV distrito, pero no lo consiguió. Conclusión: no es ningún improvisado en la política morelense y tiene capacidad de conciliación. Esperemos para ver y después diremos.
7.- El coordinador de la bancada priísta en el Congreso local, Juan Carlos Rivera, parece traer línea de su dirigencia partidista para sumarse al trabajo que de manera abierta hacen las dependencias federales para dar a conocer las políticas, programas y beneficios que realizan en la entidad y que serían, por tanto, motivo de reconocimiento para el gobierno priísta del presidente Enrique Peña Nieto, y no para el gobierno del estado. Por lo pronto, el ex alcalde de Xochitepec trae atravesado el tema de las becas salario, del que señala en todos los foros a donde se presenta, que es un programa federal financiado con recursos federales y el gobierno de la entidad aporta una cantidad menor. Como en este caso, el discurso de Rivera Hernández irá señalando los programas que se deben a la Federación y no a las autoridades estatales, y es previsible que su discurso irá subiendo de tono conforme se acerque la época electoral. A ver.