Campos escribió que debatir no figura entre las prioridades de quienes aspiran a un cargo de elección popular. Me parece que las reflexiones del director general de Mitofsky siguen vigentes y nos sirven para analizar la exacta dimensión del debate organizado anoche por el Instituto Morelense de Procesos Electorales (Impepac), cuyo escenario fue el Instituto Morelense de Radio y Televisión (IMRTV) con la participación de algunos aspirantes a la presidencia municipal de Cuernavaca.
2.- Partiendo de lo escrito por Roy Campos, los debates son solo momentos de la campaña que pueden o no ser importantes, dependiendo de si los ciudadanos los tomarán en cuenta para su decisión a la hora de emitir su sufragio. Añadió el experto: “Para algunos candidatos el debate es la oportunidad de mostrarse mejor que los demás y exhibir debilidades de los adversarios”. Así, los abanderados partidistas buscan que haya muchos de tales ejercicios, lo cual es normal entre quienes no son favorecidos por las encuestas. Ansían que los debates cambien las percepciones a su favor. En resumidas cuentas, esas lidias no tienen como objetivo comunicar a los ciudadanos lo que buscan saber. “Son momentos de la estrategia; se busca dar golpes o evitar golpes de los adversarios”, indicó Campos. Hasta aquí las referencias al excelente trabajo del director general de Consulta Mitofsky.
3.- Cuando redacté la presente columna sabía que Maricela Velázquez Sánchez, candidata de la Coalición PRI-PVEM-PNA, y Cuauhtémoc Blanco Bravo, del PSD, no acudirían al debate del Impepac arguyendo que la institución no les garantizó seguridad luego de los recientes hechos acaecidos en la UAEM y la Canaco-Cuernavaca. Y también sabía que Luis Miguel Ramírez, del PAN, estaba “reflexionando” si acudía o no, por las mismas causas. Frente a tales posiciones debo recordarles, amables lectores, que la violencia en los lugares citados ocurrió este martes 26 de mayo. Tocante al caso de Maricela diré que el lunes 25 del mes en curso los representantes del PRI, PVEM y Nueva Alianza ante el Impepac (José Luis Salinas Durán, Bernardo Salgado y Mauricio Arizmendi, respectivamente), le enviaron un escrito a “María” Isabel León Trueba, presidenta del Consejo Estatal Electoral, solicitándole el cambio de sede para la realización del debate, puesto que –así lo consideraron- no se estaban garantizando los principios de imparcialidad y equidad rectores de todo proceso electoral.
4.- Agregaron que basaban su pedimento ante la “notoria intervención del titular del Poder Ejecutivo Estatal en dicho proceso (…) toda vez que el mandatario se encuentra promocionando inversiones del sector privado en la capital, el Programa Beca Salario, así como una iniciativa para convertir en ley obras como la construcción de la Ciudad Judicial, la remodelación del puente Porfirio Díaz, así como la remodelación del Centro Histórico (…) todo ello con el inequívoco fin de fortalecer la imagen de su gobierno emanado del Partido de la Revolución Democrática y por ende para favorecer al candidato de su partido a la presidencia municipal de Cuernavaca, Jorge Messeguer Guillén. Por eso se le comunica que de persistir la intención de ese organismo electoral de llevar a cabo el debate en los estudios del Instituto Morelense de Radio y Televisión, la candidata Maricela Velázquez no asistirá, dadas las condiciones de inequidad y parcialidad”. Así las cosas exigían el cambio de sede para el mentado debate, recordando que otros ejercicios similares tuvieron lugar en las instalaciones del Impepac cuando se llamaba Instituto Estatal Electoral. En el escrito no hubo ninguna alusión al tema de la seguridad, simple y sencillamente porque los hechos en la UAEM y la Canaco ocurrieron en otra fecha, el martes 26 de mayo.
5.- Es importante subrayar que a pesar de la posición asumida por los representantes de la Coalición PRI-PVEM-PNA ante el Impepac, al filo de las 15:30 horas existía la posibilidad de que Maricela asistiera al debate programado a las 21:00 horas. Ella misma indicó que así lo estaba analizando con la dirigencia estatal de su partido. Mientras tanto la presidenta del multicitado órgano electoral, Ana (no María) Isabel León Trueba, había declarado que cualquier objeción con respecto a la seguridad en la sede del IMRTV era un simple pretexto mediático y político. Etcétera, etcétera. Conclusión: en lo personal me parece que los operadores de Mary Chica saben que el debate no impactará en el ánimo de los votantes debido al bajo rating del IMRTV y a que su candidata se encuentra bien posicionada en las preferencias electorales. Desde luego, tampoco desean exponerla a impugnaciones. Por otro lado la posición asumida por “El Cuau” es comprensible, pues desconoce lo concerniente a este tipo de ejercicios encuadrados dentro de la comunicación política. No tiene discurso. Hasta el momento de escribir este entrego periodístico no se había confirmado su asistencia. Con relación a Luis Miguel Ramírez cualquiera sabe que su protagonismo se queda en eso: es puro show. Y casi entrada la noche trascendió que la candidata del Partido Humanista, Elsa Martha Zavala, tampoco iría al “agarrón” por los mismos motivos. A ver.
6.- Era de esperarse que en algún momento las actividades ordinarias del Congreso local se vieran afectadas por las actividades políticas en que están inmersos la totalidad de los diputados morelenses. Y es que todos, sean o no candidatos, están participando en algún proyecto político en los actuales procesos electorales local y federal. Por eso no extraño que para la sesión de ayer no se reuniera el número suficiente de legisladores y la presidenta del Congreso, Lucía Meza, se viera obligada a posponer la sesión para el 10 de junio. El miércoles venidero, 3 de junio, la efervescencia política será aún mayor que la de ayer, pues en esa fecha se cierra oficialmente el periodo de las campañas electorales. Los titulares de los órganos de gobierno del legislativo, que son la propia Lucía Meza y el presidente de la Junta Política, Javier Bolaños Aguilar, se apersonaron oportunamente en el salón de plenos para sesionar, pero el esfuerzo fue en vano… Las campañas están en la recta final y han sido intensas por momentos pero aún me queda la impresión de que muchos de los candidatos a diversos cargos son en realidad desconocidos para los ciudadanos. Los debates organizados por la autoridad electoral son tachados de no alcanzar precisamente el calificativo de debate porque fue escaso el intercambio de ideas, lo que a mi juicio ocurrió porque es alto el número de abanderados. Por esa abundancia el elector no logra fijar su atención en muchos de ellos, y hoy aún para quienes vivimos cotidianamente con la información política es difícil precisar los nombres de todos los que buscan posiciones por todos los partidos.