Y según nuestro marco constitucional es obligación del Estado mexicano garantizar la seguridad pública, lo que muchas veces no sucede. Ante ello debemos recurrir a medidas emergentes, como la contratación de empresas de seguridad privada. La realidad nacional y estatal demuestra que la inseguridad es recurrente y en determinados casos supera por mucho las acciones gubernamentales en la materia. Es, pues, un mandato constitucional incumplido, aún y cuando se hacen esfuerzos para enfrentarla. Recientes encuestas aplicadas por instituciones federales (entre ellas el INEGI) demuestran que la sociedad mexicana todavía no está satisfecha con los avances conseguidos por los tres órdenes gubernamentales en el complicado tema de la seguridad pública.
2.- Sin embargo, las autoridades federales, estatales y municipales, además de la problemática ya descrita, padecen la politización de la seguridad. Los mexicanos llevamos más de 12 años observando dicha práctica: políticos y politiqueros de todas las tendencias partidarias convirtieron el tema en un recurso para apuntalar carreras y candidaturas. Así las cosas quiero referirme hoy al ensayo titulado “¿Politización de la seguridad o securitización de la política?”, de Lucía Dammert y Javiera Díaz, coordinadora e investigadora, respectivamente, del Programa Seguridad y Ciudadanía de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) en Chile. Dicha institución, con filiales en América Latina y el Caribe, es auspiciada por la UNESCO. Por otro lado diré que el término securitización significa, por ejemplo en el mundo financiero, otorgarle valor a algo. Se adapta por completo al tema de hoy.
3.- Quise sustentar la columna con porciones de esa investigación ante la siempre presente politización de la seguridad pública en Morelos que, desde mi particular opinión, comenzó cuando el gobernador Graco Ramírez prometió erradicar la inseguridad en el lapso de 18 meses, mismos que comenzaron a contar el 1 de octubre de 2012. La administración morelense cumplirá tres años el próximo 1 de octubre, en los cuales el titular del Poder Ejecutivo ha enfrentado los vaivenes de esa politización o securitización del tema. Dicen Lucía Dammert y Javier Díaz: “La tendencia regional que se evidencia en los discursos y programas presidenciales de la región está claramente alejada del análisis técnico de la seguridad. En esta materia el populismo ha marcado las propuestas de la mayor parte de los candidatos y presidentes electos de América Latina. Se puede afirmar que el tema de la seguridad es claramente uno de los más sensibles y visibles para la ciudadanía, los medios de comunicación refuerzan la sensación de amenaza constantemente, y los políticos han comenzado a utilizar la temática para aumentar su apoyo popular y engrosar la cantidad de votos. La politización de la seguridad es un fenómeno alarmante pues aleja la temática de la discusión de fondo, en el plano preventivo y de largo plazo, acercándola a discursos altamente populistas, orientados al control y mano dura, con limitados análisis que respalden su éxito, aún en el corto plazo”. Sin duda alguna, todo lo que se ha expresado en torno al Mando Único de Morelos se inserta dentro del anterior marco contextual.
4.- Así las cosas, amables lectores, me pregunto: ¿Existe en Morelos una verdadera voluntad en todos los sectores sociales para enfrentar con seriedad los problemas de la violencia y la criminalidad? Mi respuesta es NO. Existen muchas evidencias de que el tema se convirtió en una herramienta electoral efectiva y que la securitización de la política va de la mano con la propuesta de políticas públicas altamente demagógicas y represivas (verbigracia la presencia de las fuerzas armadas). El juego político ha impactado a la esfera de la seguridad deteriorando las visiones técnicas más integrales, de mediano y largo plazo. Y ahí viene una nueva etapa de desestabilización sobre las actuales políticas públicas respectivas. Es cuando surgen determinados vacíos aprovechados por la delincuencia común y organizada.
5.- Cambiemos de frecuencia. Las amenazas de las autoridades para los maestros que participen en el paro laboral y la marcha de maestros del próximo lunes, no serán suficientes para impedir que un numeroso grupo de ellos, estimado en miles por los organizadores del Movimiento Magisterial de Bases (MMB), deje de participar en este evento que tiene como propósito protestar, una vez más, en contra de la Evaluación Educativa derivada de la Reforma del ramo, la cual, según los docentes, busca ser utilizada solamente para poner en riesgo sus puestos de trabajos, a los que están decididos a defender. De esto hablaron ayer en conferencia de prensa los maestros disidentes aglutinados en el MMB, quienes revelaron que el lunes habrá marcha también en las zonas oriente y sur de la entidad. En tanto, el secretario de Gobierno, Matías Quiroz, reiteró ayer que el gobierno garantiza las condiciones para que inicie debidamente el año escolar este 24 de agosto, dado que se ha trabajado para ello a través del IEBEM y con el SNTE. Estaremos pendientes de los acontecimientos y después diremos. Recordaré que la CNTE de Oaxaca quedó en ridículo este jueves cuando convocó a los padres de familia de aquella entidad a iniciar el nuevo ciclo escolar en las alrededor de 14 mil escuelas existentes. Tuvo respuesta en no más de 210 planteles.
6.- La entrada en vigor del acuerdo de la Secretaría de Movilidad y Transporte que encabeza Manuel Santiago Quijano, que instruye una nueva identificación cromática para los taxis en los municipios que integran la zona metropolitana de Cuernavaca, permitirá combatir el pirataje y sobre todo dará mayores elementos para la seguridad de los usuarios y para la seguridad pública en general. Los taxis han venido siendo usados para cometer ilícitos en contra de los pasajeros y de la ciudadanía en general, y en el mismo sentido un indeterminado número de vehículos que lo fueron del servicio de transporte de pasajeros sin itinerario fijo, que ya dejaron de serlo pero que no han sido pintados de otro color y su apariencia sigue siendo la de un taxi. Son varios los casos conocidos de ilícitos en los que se han usado taxis, desde el asalto a usuario hasta el uso de la unidad para transportar maleantes que cometen robos y otros delitos, pero ello se deberá reducir con una cromática que permita la identificación plena y rápida de cada unidad, así como la propia identificación de los conductores que se ponga a la vista de los pasajeros. Vale la pena que se vuelva la vista, también, a las muchas fallas de las que adolece el transporte colectivo… A ver cómo cae en la Diócesis de Cuernavaca la unión matrimonial consumada la víspera entre dos mujeres. Ello ocurrió en Xochitepec… No hay nada firme todavía en la elección de Cuernavaca. El Tribunal Electoral de Morelos instruyó al Impepac abrir 232 paquetes electorales de los comicios celebrados el pasado 7 de junio. A ver.