Empero, las personas más grandes de la historia fueron aquellas que descubrieron sus cualidades y las utilizaron para el beneficio ajeno en grado superlativo. Así las cosas, es importante señalar que las personas con más fortalezas pudieran ser las que más debilidades tienen. De hecho, se poseen más debilidades que fortalezas. Somos fuertes en dos o tres cosas y débiles en cientos de otras. Quien opine al revés es un total estúpido. Y en cuestiones políticas lo que menos debe existir es la soberbia y la autocomplacencia.
2.- Menospreciar a alguno de los adversarios políticos constituye una equivocación garrafal, porque en su aparente debilidad pueden radicar una o varias fortalezas. ¿Quién es, pues, el gobernante, político y servidor público idóneo? Podríamos definir el “gobernante perfecto” como el imaginario social que, de acuerdo con la opinión de los ciudadanos, representa la personalidad política perfecta. Este imaginario refleja el consenso tácito al que arriban los electores luego de un complejo proceso de valoración colectiva que se da en tres dimensiones. La primera corresponde a la coyuntura que aparece en el tiempo presente. La segunda hace referencia a la historia más cercana o sea el pasado. Y por último las ilusiones de progreso y cambio para el futuro. Para ganar adeptos en una campaña, el factor determinante que dirige al triunfo a cierto candidato es cómo está forjada su personalidad en función de la demanda del electorado. Pero la mayoría de las veces ese factor es rebasado por la realidad, fundamentalmente en sentido económico, lo cual impide al candidato, ya convertido en gobernante, poder cumplir su cauda de promesas expuestas en campaña.
3.- Kathy Allen, columnista política de NBC-TV y analista de tendencias electorales, en su libro titulado “Recuperando la política; una guía para ganar” (Canadá, Jalapeño Press, 1965, p. 365), indica que los atributos positivos de algunos políticos son: buen sentido del humor; capacidad para delegar, para hablar en público y para responder preguntas difíciles; buenas relaciones con la prensa; orientación hacia el trabajo duro; físicamente en buena forma; capacidad para el estudio rápido y habilidad para hacer sentir cómoda a la gente; inclusión. En contraste, los principales atributos negativos son: temperamento que responde fuertemente al más ligero estímulo, dificultad para delegar, ser reservado y abrupto, dificultad para enfocar problemas y situaciones, voz monótona, dificultad para escuchar, problemas de adicciones, tendencia a pontificar (exponer opiniones o ideas como dogmas con alarde y suficiencia), belicosidad y dificultad para confiar en los demás. Además, el partido político que impulsa al respectivo político adquiere relevancia. De ahí que su partido se convierta en un activo o en un pasivo. En el primer caso (dice Allen) la persona puede tratar de destacar su filiación partidista y la tarea de campaña o de gobierno debe ser reducir al mínimo las defecciones; en el segundo, al contrario, puede intentar desligarse de su propio partido para facilitar el la aceptación escindida de ciudadanos identificados débilmente con el partido contrario. Finalmente la identificación del nombre tiene mucho que ver, así como el rating de favorabilidad. Posteriormente definiré el perfil del presidente municipal “perfecto”.
4.- Cambiemos de frecuencia. En la noche del 27 de noviembre unos 50 burócratas miembros de diversos sindicatos acudieron al Congreso local para presenciar la sesión que inició al filo de las ocho de la noche y se prolongó más allá de las tres de la madrugada del sábado. En la siguiente sesión, también nocturna, ese mismo grupo de trabajadores presenció la sesión de este jueves pasado, que inició por ahí de las nueve de la noche y duró hasta cerca de la una de la mañana del viernes. ¿A qué viene tanto amor de los sindicalistas por el proceso legislativo? Lo que mueve a este grupo a presentarse al Congreso es el temor de que los legisladores les madruguen presentando y aprobando un dictamen sobre la Ley del Servicio Civil, que modifique el régimen de pensiones y jubilaciones afectando sus intereses. Los diputados ya se han comprometido públicamente a que no lo harán, pero ¿acaso no son los diputados unas de las autoridades menos dignas de confianza a los ojos de la ciudadanía? En la última sesión el tema de las pensiones se tocó únicamente de refilón en la parte final, y ahí se puso de manifiesto que la desconfianza de los burócratas en una jugarreta tiene sustento, pues tienen solo un aliado entre los 30 del Congreso: el polémico Jesús Escamilla Casarrubias. La apuesta de los demás es por un análisis prospectivo responsable del tema, lo que equivale a cambiar el régimen de pensiones y jubilaciones que hoy se encamina al abismo. A ver.
5.- Tal vez es un problema de percepción, pero los transportistas adscritos a la Federación Auténtica del Transporte, la organización Rutas Unidas y diversas agrupaciones de taxistas de la entidad coinciden en que a la Secretaría de Movilidad y Transporte no se le ve un futuro halagüeño en las manos de su actual titular, Jorge Messeguer Guillén. Y no es que el funcionario no pueda ser capaz de ejecutar las tareas de la dependencia. Es de profesión ingeniero, por lo que vale suponerlo inteligente. Ha sido diputado y secretario de Gobierno, entre otros cargos, lo cual acredita su experiencia en la cosa política y administrativa. Pero es evidente que los objetivos perseguidos tanto por el funcionario como por los líderes gremiales (Dagoberto Rivera, Aurelio Carmona, Víctor Mata y otros) no son los mismos. El problema de esta pugna que día a día crece entre los transportistas y las autoridades del sector, es que en medio de ellos se encuentran los usuarios del transporte público, afectados por el servicio de rutas y taxis que no mejora. Se antoja la necesidad de revisar y explicar a los morelenses porque los conflictos relativos a la SMyT nunca ofrecen visos de mejoría.
6.- A partir de esta semana comienza a decrecer el interés de la sociedad por asuntos de la política doméstica y comienzan a distraer su atención cada vez en mayor medida los relativos al disfrute del periodo vacacional que se avecina y los festejos en él enmarcados. El sector público de los tres órdenes entrará la semana siguiente en temporada de asueto y con ello se relajan las inquietudes sobre la problemática social, al menos en lo concerniente a la parte de las autoridades. Los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial estarán inactivos y retomarán sus labores luego del primer fin de semana de enero. La diferencia se dará en los 33 ayuntamientos, que vivirán el fin y el principio de las correspondientes administraciones municipales y tendrán días febriles particularmente por la pelea de los espacios burocráticos en las comunas. Las policías no deberán tener un momento de descanso para salvaguardar la integridad física de la población y es deseable que los cuerpos de rescate y urgencias médicas tengan poco trabajo. El maratón Guadalupe-Reyes está inaugurado y ¡que Dios nos agarre confesados!