La sugerencia de los panistas, impulsada entre otros por el diputado federal Javier Bolaños Aguilar, es quitar el Impuesto Especial a la Producción y Servicios (IEPS), que es aplicable al rubro de los energéticos, y a partir de ahí, tratar de bajar el costo del insumo, cosa que seguramente deberá ser ampliamente discutida, tanto en el Senado de la República, como en la Cámara Baja.
En esta búsqueda oficial constante por mejorar el nivel de recaudación fiscal que ha venido a menos por varios motivos, entre ellos el mal uso de los dineros y por la nula evolución de la economía, se ha recurrido siempre a la aplicación de nuevos impuestos, lo cual, parece, sigue siendo insuficiente, porque las autoridades se continúan quejando de lo mismo, faltan recursos para enfrentar las necesidades nacionales.
Bueno, desde la Federación, hace apenas unos meses, se dio a conocer un recorte histórico de personal a fin de bajar la nómina en miles de millones de pesos y aún así, el ingreso se mantiene restringido, tanto que el presidente Enrique Peña Nieto explica que de no haber incrementado el precio de la gasolina, muchos programas de asistencia social se habrían cancelado, como Progresa o rubros de atención médica fundamentales.
Aún con todo eso las finanzas públicas no alcanzan el equilibrio y ya las entidades federativas han empezado a tomar medidas de austeridad, porque la inflación que se comienza a generar les afectará considerablemente. Desde luego que en eso los municipios tampoco están exentos.
Independientemente de algunas propuestas como la del PAN en lo que respecta al IEPS, como que ahora sí es momento oportuno a fin de que se valore una reducción significativa a nivel burocrático y de representación popular.
Mucho se ha discutido y hasta reclamado, desde la óptica social, el por qué de la sobrerrepresentación ciudadana en los congresos, tanto estatales como federales. Como que los dichosos diputados plurinominales no tienen función alguna y sólo van a representar un gasto inútil al erario.
No existe algo que explique al pueblo cual ha sido el beneficio para el país de esos “representantes”, que son inducidos por sus partidos políticos y son los que llegan a ocupar los principales cargos en las legislaturas, porque así lo disponen los institutos políticos a los que pertenecen.
Hace mucho que no se aprecia alguna reforma con cierta utilidad colectiva, que ayude a una mejor convivencia o alivie las duras penas que enfrenta un pueblo en la desesperación y el abandono por parte de sus autoridades. Entonces ¿Por qué seguir manteniendo a una bola de vividores?
Aquí en el estado son 30 los que conforman la legislatura y la absoluta mayoría es vista con desconfianza por el populacho. Con los 18 de mayoría es más que suficiente para atender el trabajo que desarrollan; los otros 12 salen sobrando, pero a nivel nacional hablamos de 150, cuya mayoría se fue con una bolsa de 500 mil pesos por aguinaldo, bonos y demás prestaciones.
La impotencia y coraje colectivo se justifica ampliamente, porque sí hay manera de seguir adelgazando a la burocracia en los tres niveles de gobierno, así como a los poderes, pero no hay voluntad superior. Simplemente no aceptan ningún sacrificio y a costa del hambre de sus gobernados se mantienen en el privilegio, eso es lo que realmente molesta.
Si observáramos un esfuerzo real y comprometido de los políticos con el país, otra actitud se observaría en el mexicano, pero tal parece que no hay consciencia, mucho menos compromiso de los que detentan el poder público y ello demuestra que no les interesa el dolor de aquellos que no encuentran ya una puerta de salida.
EN REPUDIO A LA CORRUPCIÓN, NACE EL MAS
Y precisamente hablando de esa corrupción del gobierno, que ya nos tiene hasta el cuello, el ex presidente municipal suplente de Cuernavaca, Rafael Cepeda Aguilar anunció la creación de lo que dijo se denominará, el “Movimiento Amplio Social” (MAS), de corte ciudadano, que buscará ir exhibiendo ante la población toda clase de irregularidades de quienes gobiernan, desde la presidencia de la república hasta los ayuntamientos, pasando por el estado, desde luego.
Adelantó que harán aparición pública el próximo 29 de los corrientes e iniciarán con una colecta de toda clase de artículos, incluidos los alimenticios, a fin de poder llevar un poco de aliento a aquellas familias que viven en la pobreza y el desamparo.
El también ex dirigente del CDM del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Cuernavaca señaló que si bien se ha tenido que llegar a un aumento inaceptable de la gasolina a fin de evitar el desajuste financiero en la administración pública, por efectos internacionales, todo tiene su origen en la corrupción. “Es el derroche y la malversación del dinero del pueblo desde hace años lo que ha llevado a este extremo”.
La idea, dijo, es ir generando conciencia en la población respecto a la importancia de que se involucre y participe en todo aquello que le genera un efecto, positivo o negativo; hay que salir a las calles a defender nuestros derechos antes que ponernos de rodillas.
El llamado fue abierto, es decir, cualquiera que tenga posibilidades de donar algo útil para los demás podrá entregarlo a quienes se instalarán al fondo de la plaza de armas Emiliano Zapata ese 29 de enero desde las primeras horas de la mañana.
La estrategia no está mal, es necesario que muchas voces comiencen a levantarse y a presionar para que en adelante, los políticos moderen sus acciones y por lo menos guarden las formas en la manera de conducirse al frente de instituciones gubernamentales.
Igual y nos encontramos en los inicios de un despertar generalizado, que parece ser la única manera de hacer comprender a quienes detentan cargos con base en el erario, que la paciencia se ha agotado y ello los obligue a corregir el camino.