En lo que corresponde al tricolor, a pesar de que algunos otros personajes, como el ya ex edil Manuel Martínez Garrigós advierta que va a inscribirse para intentar regresar a la alcaldía, en la práctica sólo son dos los que van por la candidatura: Matías Nazario Morales y Maricela Velázquez Sánchez, simplemente porque son los que desarrollaron un buen trabajo para abrirse el camino, con todo tipo de gestiones ante el electorado.
Hay una visión algo distorsionada sobre quién se quedará con la posición a nivel de aspirante, algunos refieren que el domingo se conocerá al candidato oficial; no es así, se trata de la inscripción de los contendientes internos. Está previsto que se les registrará a ambos, incluso a algún otro sí cumple con los requisitos para el caso, irán a un proceso de precampañas en sus respectivos partidos y luego de este periodo vendrá la determinación.
Pero hay que tener igualmente presente que la decisión, para el caso único de la alcaldía capitalina, no sale del CDE del PRI, viene directamente de la dirigencia nacional a cargo de César Camacho Quiroz, aunque este mecanismo se repite en el caso del PAN y el PRD, por tratarse de un espacio estratégico y de interés de las altas esferas partidistas e incluso del poder central.
Pero ¿cuáles serían las reflexiones en relación a uno y otro?, para empezar diríamos que una cosa es ir a la competencia electoral constitucional y otra es eventualmente ganar y ser el alcalde o la alcaldesa de la capital del estado y es ahí donde se tiene que reflexionar.
En lo que toca a las posibilidades de ambos para ganar la presidencia, pudiéramos considerar que van casi al parejo, hay quienes le conceden ventajas a ella, aunque advierten que le pesa la sombra de su madre. Otros sostienen que Nazario desarrolló hasta ahora un trabajo más de fondo con los electores, pero a decir verdad, dadas las mediciones, pareciera que ambos podrían llevarse la contienda.
Pero el otro asunto es el de encabezar un proyecto de gobierno municipal y aquí sí apreciamos profundas diferencias, por más apoyos que traiga Maricela de parte de algunos –más que connotados personajes, viejas figuras del PRI, como Manlio Fabio Beltrones- la vemos con falta de formación y experiencia para gobernar un espacio francamente difícil, sólo hay que ver cómo la ha sufrido el actual edil Jorge Morales Barud.
Ella no tiene carrera política de gran tamaño, tampoco ha compartido posiciones de rango en la administración pública, la realidad es que se sacó la lotería al llegar al Congreso de la Unión, porque además personalmente no le sabemos trabajo de partido, la posición fue algo así como una herencia de Maricela Sánchez y Guillermo del Valle.
Aquí sí Nazario cuenta con más camino andado, así fuera en responsabilidades más bien relacionadas con el aspecto informativo, independientemente de que relaciones de buena estatura tiene y hasta algunos aliados en otros partidos, como Nueva Alianza.
Pero hay algo más e insistimos, porque ya lo hemos dicho, si eventualmente la candidata a la presidencia municipal de Cuernavaca por el PRI fuera Maricela, el primero en alegrarse sería el gobernador Graco, sabedor de que tendrá el manejo político en lo absoluto de la capital, le daría casi lo mismo que ganara ella o Jorge Messeguer, porque Guillermo y Maricela mamá se la jugaron con él en el 2012, es decir son sus aliados, ¿o no?
PRD: COALICIÓN ¿PARA BIEN O PARA MAL?
En otro orden de ideas, ayer los presidentes del Partido del Trabajo (PT), Tania Valentina y del Partido de la Revolución Democrática (PRD), José Luis Correa Villanueva, anunciaron una “alianza flexible”, es decir sólo en algunos municipios y distritos locales, así como una candidatura común en Cuernavaca.
Los amarillos siguen buscándole la cuadratura al círculo, ante un escenario hasta hoy incierto en este territorio, finalmente lograron coaligarse con el PT y también con el Partido Encuentro Social (PES), claro, usted ciudadano común dirá y ¿quiénes son esos?, pues se trata de un nuevo instituto que no da muestras de existencia y ante tales condiciones uno diría ¿esos acuerdos electorales son para sumar o restar?
Bueno, en lo que toca al PES, ya decíamos que no pinta, lo más probable es que acabe perdiendo su registro y sobre el PT, hasta donde sabemos, continúa manteniendo en sus filas al diputado Alfonso Miranda Gallegos, tío del famoso “Carrete”, uno de los más buscados no sólo en Morelos, sino en la zona centro del país.
Con todos esos antecedentes se aprecia que el instituto pasa por sus peores momentos, porque además la dirigente estatal tampoco ha abonado mucho en la buena imagen para el partido, entonces ¿quién gana realmente con esta alianza?, eso se preguntaban ayer algunos compañeros y la mayoría concluía que el PT, porque tratará de colgarse de la solapa de los perredistas para sobrevivir y continuar cobrando las prerrogativas, que es lo que le preocupa a este tipo de organismos de carácter electoral.
Pero esos acuerdos fueron tejidos en las dirigencias nacionales, o sea signados por Alberto Anaya, presidente del CEN del PT, y Carlos Navarrete del PRD, aquí sólo están acatando las instrucciones y entre ellas está aquella de que van coaligados en los cinco distritos electorales federales, la condición va en el sentido de que en cuatro de ellos habrá candidatos del sol azteca, en uno de los petistas, asimismo irán coaligados en cinco o seis municipios y bajo el slogan de “coalición de izquierda progresista”. Pero la prioridad, lo dijeron ahí, es ganar Cuernavaca.