Durante la temporada de frío, la piel puede resecarse debido a las bajas temperaturas y los vientos secos. Para mantenerla bien hidratada, es importante seguir algunas recomendaciones.
Primero, elige una buena crema humectante. Con el clima frío, es recomendable optar por una crema más densa que contenga ingredientes como ácido hialurónico, ácido láctico y glicerina, que son ideales para combatir la sequedad.
Aplica la crema cuando la piel esté húmeda, ya sea después de lavarte la cara o tras la ducha. Esto ayuda a retener la humedad antes de que se evapore, un paso crucial en invierno.
Cuidado con la temperatura del agua; aunque puede ser tentador tomar un baño caliente, el agua caliente tiende a eliminar la humedad de la piel. Es mejor usar agua tibia. Además, usa jabones humectantes y sin alérgenos para complementar la hidratación.
No olvides beber suficiente agua, al menos ocho vasos al día, para ayudar a hidratar la piel desde adentro. Proteger las manos es fundamental; utiliza guantes y aplica crema de manos reparadora varias veces al día.
Finalmente, considera usar un humidificador en climas muy fríos, ya que añade humedad al aire y previene la sequedad y picazón en la piel. Siguiendo estos consejos, podrás mantener tu piel saludable y bien hidratada durante el invierno.