La idea de ver resumidas en una parte circunscrita del cuerpo todos los componentes del organismo y de poder modificar su estado mediante intervenciones limitadas a esa parte es una proyección que se encuentra bastante extendida tanto en Oriente como en Occidente.
Los expertos en masaje zonal comparten dicho concepto. En efecto, están convencidos de que en los pies y en las manos existen zonas representativas de todas las demás partes del cuerpo, con las cuales están conectadas por vía nerviosa. Además, consideran que, como consecuencia de influencias ambientales desfavorables, se puede registrar una ingente acumulación de sales de calcio y de cristales de ácido úrico en las terminaciones nerviosas de los pies, bloqueándolas y en consecuencia alterando la estimulación normal de glándulas y órganos. Determinados masajes pueden contribuir a la eliminación de estos cristales y sales, devolviendo así a los órganos su estimulación normal y en consecuencia la capacidad de recuperar en poco tiempo sus funciones normales.
Los orígenes históricos del masaje zonal se remontan, inevitablemente, a Hipócrates, padre de la medicina occidental que vivió en el siglo V y defensor del masaje en general. No obstante, no faltan tampoco ejemplos más cercanos a nosotros de hombres ilustres que han practicado con muy buenos resultados el masaje zonal; entre ellos cabe citar al polifacético Benvenuto Cellini (15OO-15), que al parecer combatía dolores de todo tipo imprimiendo una fuerte presión sobre los dedos de las manos y de los pies.
No obstante, la ordenación actual del masaje zonal es obra reciente del médico norteamericano William H. Fitzgerald (1872-1942), que empezó a dar a conocer sus teorías y sus resultados prácticos en 1~3. Según dicho autor el cuerpo humano se halla atravesado, en sentido longitudinal, por diez meridianos, que lo dividen en otras tantas zonas, cada una de ellas ocupada por determinados órganos cuyo "reflejo" se encuentra en áreas perfectamente definidas de los pies y de las manos. Sobre este planteamiento de origen se han producido numerosas variantes, sobre todo en lo referente a la técnica de masaje de las distintas zonas de los pies y de las manos, que no tienen una indicación concreta, pudiendo cada uno seguir sus propias directrices.
Clasificación de la reflexología
La reflexología moderna ha sido clasificada dependiendo del sitio en donde se estudien o traten las zonas microreflejas; de tal manera que podemos ver la siguiente clasificación:
Iridología
Es el conocimiento y aplicación en el diagnóstico de enfermedades, de las zonas microreflejas en el iris de los ojos, las cuales corresponden a los órganos internos, y mediante la modificación de las estructuras y el color visible del iris, es posible obtener información del estado de salud que tiene cada órgano del cuerpo. Este método es útil sólo para fines de diagnóstico ya que al iris del ojo no tenemos acceso como para producir estimulación alguna desde ese sitio.
Reflexología auricular
Es la teoría de la reflexología aplicada al pabellón de las orejas. Este método es frecuentemente utilizado por los acupunturistas, sobre todo en tratamientos prolongados en los que la portación de agujas en otros sitios de la piel resultaría muy molesta para cualquier persona con actividad cotidiana.
Reflexología podálica
Son las zonas microreflejas de todos los órganos del cuerpo, localizadas en el área de los pies. Éste es el método más frecuentemente utilizado y el más popular de la reflexología.
La reflexología podal en los ancianos es beneficiosa para las funciones motoras e intestinales y aumenta la capacidad respiratoria y ayuda a eliminar las toxinas. Los masajes en personas de la tercera edad deben ser suaves y delicados.
La reflexología podal puede realizarse en una silla o sofá, incluso hay pacientes que lo hacen en el suelo, apoyados sobre una camilla. El reflexólogo deberá situarse en una posición más baja que el paciente, tomando en cuenta la comodidad de éste.
Los pacientes podrán determinar el tiempo de duración de cada sesión, en función de sus síntomas.
El próximo jueves 28 y viernes 29 de octubre, se llevarán a cabo las Jornadas Gerontológicas “Olga Tamayo” de 8:30 de la mañana a 14 hrs., donde precisamente uno de los temas dentro del programa de actividades será, precisamente, reflexología en adultos mayores.