Hay en el Foro Morelense muchísimos abogados con mayor talento, conocimiento jurídico y presencia profesional que personal de alto rango en el Poder Judicial. Lo saben todos. ¿Por qué no se organizan ellos y hacen su evento partiendo de la perspectiva que tenga cada una de sus agrupaciones? Enriquecería mayormente a una sociedad como la nuestra.
Es el Día del Abogado, no el Día del Magistrado o Día de la Justicia desde las instituciones públicas. Quién sabe cuándo lo permitieron, pero con todo el respeto a muchos que son nuestros amigos, que hagan su evento y que gobernantes, ministros, magistrados, jueces, procuradores, ministerios públicos y anexos acudan en su calidad de abogados o invitados pero sin poner reglas.
Nos extraña. La nota dice que hasta el año pasado lograron romper “el veto que les sometió el magistrado presidente Ricardo Rosas Pérez”. Un lugar representativo de la justicia ante el desgaste de las instituciones, será donde acuerden la mayor parte de profesionales del Derecho. Puede ser el zócalo o un restaurante u hotel que determinen. Que cada quien pague su desayuno y algo más para la organización, incluidos los invitados. Donde ellos digan, no en el sitio que ordene el tribunal en turno. Ellos pasan y se alejan normalmente mal recordados, en cambio abogados—abogados morelenses reconocidos, los tenemos presente siempre.
Leemos que la bravía Adela Manzanares Alonso pide lugar entre los oradores. No, que ellos determinen quiénes van a hablar; que el gobernador con sus acompañantes, el magistrado presidente del TSJE, el procurador y su plantilla, los escuchen. La Barra y los Colegios eran el semillero. Ya no es así. El lugar que la sociedad les tiene con respeto se ve de distinta manera desde el escritorio del funcionario del Ejecutivo o del Poder Judicial. No era así. Un retorno nunca es malo, menos hoy que la sociedad está indefensa. Que Adela no pida un espacio, que junto con los demás dirigentes profesionales marque las reglas para ese día, un solo día, importante sin duda, día de los abogados no de los funcionarios. Claro que será más importante cuando conozcamos la opinión que de la justicia, del gobierno, del poder, tienen los profesionales del Derecho. ¿Qué les quita recuperar lo que es suyo?
Parecido eran los festejos del periodista, organizados por los gobiernos hasta que se desgastaron. Hoy, hay reuniones privadas entre funcionarios con su fuente, entre amigos, sin el protocolo donde los periodistas parecía que acudíamos a saludar al gobernador “que nos festejaba”. ¿Quiénes eran ellos, los funcionarios? Incluso, hacían la lista de oradores y cerraba el mandatario en turno. Era más el día que los periodistas reconocían al gobernador en turno que un festejo de informadores. Los pagaba el gobierno y ponía las reglas; los discursos eran solicitados por el Ejecutivo para que se revisaran. Qué libertad de expresión ni que nada. Una vergüenza. Por ello, se acabó; nadie iba; estuvo mejor. Ahí, en la silla gubernamental, cual mesa de redacción de octava, le cortaban párrafos enteros y hasta le mejoraban el estilo. Las dos cuartillas se hacían un par de párrafos.
La nota llama la atención, porque los abogados tienen la obligación, necesidad y urgencia por reconocerse, año con año, mejorando las condiciones del aparato de justicia, del gobierno; son voces autorizadas. Ellos, sus organizaciones pues, vigorosas en la crítica, que reúnan las condiciones para que no anden pidiendo licencia a nadie en su día, su día lo repetimos y subrayamos: Su Día, el Día del Abogado, único al año.
"Los Grandes de la Caricatura Mexicana"
Viejo amigo, colega y siempre de buen humor, Enrique Heras, estrena nuevo libro. Vale comprarlo. Aquí está un correo que nos llega del buen Heras:
El caricaturista Enrique Heras presentó su libro "Los Grandes de la Caricatura Mexicana", en el auditorio Juan Dubernard del Museo Regional Cuauhnahuac --Palacio de Cortés--, en el centro histórico de la ciudad de Cuernavaca, capital del estado de Morelos.
Enrique Heras morelense por decisión, quien tiene una trayectoria de más de 50 años en la profesión de monero que acaba de recibir el reconocimiento de decano de los caricaturistas de Morelos. Explicó acerca de su obra: "Lo que hice fue una recopilación del trabajo de 28 grandes de la caricatura mexicana. El libro está dividido en dos partes: la primera, en la historia de la caricatura en México, desde la cultura totonaca hasta nuestros días, hasta ayer pues. Hablo de la caricatura, como se ha transformado, como ha hecho crítica. La otra parte que le da el título a la obra, consta de 28 maestros, caricaturistas e historietistas (con ilustraciones de cada uno) la mayoría con quienes conviví"
El libro contiene anécdotas que son biografías en alguna forma de los grandes de la caricatura de nuestro país.
Heras escribe una sobre el genial Ernesto "El Chango" Cabral ,"una vez lo entrevistaron los reporteros y le preguntó uno de ellos: Maestro ¿para usted cuál es el mejor caricaturista? Se quedó pensando. Todos esperaban un nombre y contestó: "Para mí, el mejor caricaturista es el tiempo. Véase en el espejo y dentro de 10 años, vuélvase a ver".
La obra se puede adquirir en las principales librerías de la ciudad de México, en el Museo de la Caricatura (Donceles 99, centro histórico) y en la Bodega de Arte (Hidalgo 32, Centro histórico Cuernavaca Morelos).
1 comentario
Atentamente.
Leobardo Alejandro Gutiérrez Rojas
Hey
Mi muy leido jaramillo frikas en relación a u artículo de los… Compartelo!