El proyecto está en el abandono, reclama la CIDH.
La Comisión Independiente de Derechos Humanos (CIDH) se sumó a la exigencia de que se reanuden los trabajos del Centro Nacional de Identificación Humana, ubicado en Xochitepec, por parte de la Federación, al recordar que en el país hay más de 55 mil cuerpos en morgues y más de 100 mil desaparecidos.
Este miércoles, integrantes del Pacto por la Soberanía Alimentaria Energética y los Derechos Humanos de las y los Trabajadores, se manifestaron en el centro de Cuernavaca como parte del movimiento de apoyo a los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa, a unas semanas de que se cumplan diez años de su desaparición.
Como cada 26 del mes, exigieron que se cumpla con la exigencia de justicia y verdad, al destacar que no se ha hecho justicia y muchas de las personas que han sido detenidas por estos hechos han quedado en libertad; pero lo más importante – señalaron- es que los estudiantes no han sido localizados.
Expresaron que confían en que la nueva administración presidencial atienda a los padres y se haga justicia.
Por otra parte, en entrevista, el representante de la CIDH, José Martínez Cruz, expresó que colectivos de víctimas han dado cuenta de que el Centro Nacional de Identificación Humana, está en condición de abandono y que nunca llegaron todos los equipos necesarios.
Por lo tanto, se sumaron a la exigencia de que se retome esta tarea, ante las contradicciones de las autoridades sobre las causas por las que no se concretó la operación del dicho proyecto.
Manifestó que el llamado al próximo gobierno federal es a que se atienda este rubro con urgencia, pues México tiene esta grave deficiencia. “Estamos en una tragedia humanitaria terrible, hay más de 55 mil cuerpos no identificados en morgues y mucha gente está buscando a sus familiares y sigue buscándolos, incluso, en fosas clandestinas”.
Refirió como ejemplo que en el caso de Ayotzinapa se han llevado muestras a otro país, cuando el gobierno mexicano podría realizar esta labor especializada con recursos propios, atendiendo la necesidad de tanta gente de localizar a sus víctimas, cuando han perdido la vida.