La vocera de dicha organización, Obdulia Díaz, acusó que desde el inicio del accidente hubo negligencia por parte de las autoridades municipales, quienes en todo momento se mostraron insensibles ante la tragedia ocasionada por un caballo que se desbocó y que hasta ahora nadie sabe explicar qué hacía ese animal en medio de la multitud. Razón por la cual, a partir de esta semana, se entablará una demanda penal en contra el presidente municipal.
Reclamó que el alcalde Luis Felipe Güemes Ríos hasta ahora se esté negando a dar la cara y que sus representantes sólo estén tratando de evadir la responsabilidad que tiene el ayuntamiento como organizador del evento.
“Fue una agonía muy larga de alguna manera; (la maestra Margarita) entró en estado de coma de manera inmediata por el nivel de los golpes. Pero nosotros quisimos hacer contacto, nos dijeron que nos comunicáramos con su jurídico, eso es lo que ellos nos están diciendo. Nosotros estábamos apelando a la sensibilidad de ellos, es decir, a la parte en que el alcalde se acercara con la familia, dialogara, platicara, hicieran presencia como lo hizo la misma gente del gobierno del estado, que vino hasta Córdoba, vinieron dos propios del señor gobernador hasta la ciudad de Córdoba a hacer el pago de los servicios”, apuntó.
Asimismo, aseguró que el ayuntamiento en ningún momento pagó los gastos médicos, debido a que la maestra Margarita Hernández García, de 48 años de edad, era asegurada. Agrega que sólo algunos funcionarios del municipio se hicieron presentes en el Seguro Social para cubrir algunos gastos. “Un Seguro Social que ya estaba pagado porque ella era asegurada, apoyando quizás con el hospedaje, pero hasta ahí, y además llevando a declarar a la persona al Ministerio Público para que disculparan la autopsia, cuando la autopsia ya estaba dispensada por el accidente.”
Señaló que ante la cerrazón de las autoridades municipales están recibiendo mucha solidaridad de habitantes de Cuautla quienes han ofrecido su respaldo. “Sabemos que el desfile lo tenía primero una síndica (Juanita Guerra Mena); después se lo quitaron y se lo pasaron al secretario del ayuntamiento (Rosendo Santos Merino); que del número de gente que organizaba lo redujo a cinco personas; que no había protección civil; que vendieron los espacios para las sillas a cinco pesos o 30… Dicen que las ambulancias no podían entrar, no había elementos de seguridad; que la gente vendió tanto los asientos de adelante que no querían dejar entrar a nadie para no perder su lugar; que el desfile continuó sin saber qué había sucedido… Una total desorganización”, insistió.
A esa actitud, agregó Obdulia Díaz, se suma la actitud negligente de los funcionarios municipales. “Yo hablé con ellos el viernes, traté de hablar con ellos y lo primero que hicieron fue poner un altavoz y decirme: ‘La estamos grabando’. Entonces les comenté que esto era para mí una molestia, esto de comunicarme con ellos por el comunicado que había visto en los periódicos de que ellos habían pagado todo; no era posible que hicieran esto, que no debía ser de esta manera y me dijo: ‘¿Me está usted amenazando?’ Dije: ‘No lo estamos amenazando; le estamos diciendo que estamos molestos y si la familia decide habrá una demanda y la fundación los estará apoyando’.”
También apuntó que el argumento principal del Ayuntamiento de Cuautla es el que no tienen dinero y que el contingente de Guatemala les salió muy caro. “No sabemos cómo le fue a la gente de Guatemala, pero sí tenemos la solidaridad de mucha gente que se ha comunicado desde Cuautla; tenemos un video del accidente, tenemos fotos, pero queríamos nosotros ahorrar tiempo a la gente y parece que el municipio está en un plan totalmente negativo. Dicen que no tienen dinero. Yo no sé si sea cierto, pero sé que para esas circunstancias siempre tienen un fondo de contingencia.”
Aclaró que la familia y la fundación no buscan linchar al ayuntamiento, pero ante la postura negativa de los funcionarios para hacerle frente a su responsabilidad, dijo, esta semana dos abogados de la Fundación Comunitaria Veracruz iniciarán una demanda penal en contra el ayuntamiento. “Sí estamos buscando que ellos sean concientes de lo que sucedió, que tengan la sensibilidad para reconocer y sobre todo, que el alcalde tenga la capacidad de comunicarse con uno; el alcalde, yo se lo dije a su particular y al secretario del municipio, ‘no vuelvo a hablar con ustedes hasta que no hable el alcalde con nosotros’. Con nadie quiero entenderme que no sea el alcalde”, acotó.