Durante tres días el río lleva agua “chocolatosa”.
Cuautla.- La presencia de escurrimientos turbios y oscuros de los Altos de Morelos que desembocan en el cauce del río Cuautla ha puesto en estado de alerta a los campesinos de la región oriente de Morelos, quienes temen afectaciones en sus cultivos debido a que durante más de 72 horas el aspecto del agua no cambia su aspecto, por lo que pidieron la intervención urgente de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) para investigar un potencial peligro.
Así lo confirmó el dirigente de la Asociación de Usuarios del Río Cuautla (Asurco), Ranulfo Flores Benítez, quien manifestó que los reportes acerca del “agua chocolatosa” los empezó a recibir desde el viernes pasado, porque a los campesinos les llamó la atención el aspecto inusual del líquido. “Sin embargo, no le tomamos mucha importancia porque pensamos que eran escurrimientos por las lluvias, pero han pasado tres días y sigue igual sin que lo turbio desaparezca”, indicó.
Este fenómeno ha preocupado a los campesinos que en esta época riegan más de ocho mil hectáreas de tierras donde se cultiva caña, arroz y hortalizas, ante el temor de que contenga contaminantes, pues aseguran que a lo largo de su trayecto el agua no deja sus sedimentos. “Buscamos la fuente de contaminación y llegamos hasta Yecapixtla donde se percibe que el agua viene de la parte alta, pero así como está de turbia y negra llega hasta Ahuehueyo, sin que se aclare en el camino”.
Refirió que los campesinos “han tocado el agua pero no tiene algún olor, pero sí sienten picazón en las manos”. Recordó que hace algunos meses en el Estado de México, en localidades como Ozumba, Tepetlixpa y Amecameca, los habitantes reportaron que de las faldas del Popocatépetl bajaban escurrimientos “chocolatosos” parecidos a los que ahora presenta el río Cuautla y que bajan más allá del municipio de Yecapixtla, por lo que pidieron la presencia de investigadores de la Conagua para determinar su origen y riesgos potenciales.
“Queremos saber qué pasa con el agua del río Cuautla. No sabemos lo que ocurre, ya tiene varios días y no se ve que el vital líquido se limpie, así llega hasta las tierras de más abajo, por Tlaltizapán y Tlaquiltenango. Eso es lo que más nos preocupa”, señaló.