Exigen investigación a fondo; el fuego destruyó el 70 por ciento de los locales.

Cuautla.- El mercado “Hermenegildo Galeana”, ubicado en la colonia Emiliano Zapata de este municipio, fue devastado por un incendio que inició alrededor de las 4:30 de la madrugada, el cual arrasó con el 70 por ciento de los locales comerciales, causando pérdida total de las mercancías a más de 350 locatarios, quienes, impotentes, vieron consumir el patrimonio de toda su vida.

El avance de las llamas provocó la indignación de los comerciantes, quienes aseguran que los elementos de seguridad no los dejaron entrar para controlar el fuego cuando aún no se propagaba a toda la nave, pues señalan que los bomberos llegaron a tiempo, pero sin el agua suficiente.

“Cuando ellos llegaron estaba focalizado en el área de hierbería; hay un sentimiento encontrado entre los compañeros porque queríamos ingresar al mercado para apagarlo y no se nos permitió, ya estaba la Policía haciendo el resguardo, pero no estaban haciendo nada adentro. Al último ya no pudo la autoridad, se quitó el tianguis navideño para que entraran las pipas. Fue cuando vieron que estaban rebasados que pudimos entrar y, con cubetas, lo empezamos a frenar para que no llegara a la zona de tanques de gas”, aseguró Julián Reyes Sandoval, exdirigente del mercado.

“Este mercado ha tenido algunos conatos de incendio; hace dos años se quemó una cerería y fuimos nosotros quienes lo apagamos porque conocemos nuestro centro de abasto… Tenemos un sentimiento de frustración; las autoridades tienen sus protocolos, pero no nos dejaron trabajar para coadyuvar”, agregó.

Para una gran mayoría de locatarios, el incendio pudo haber sido intencional debido a que el incendio se da en medio de un conflicto provocado por el Ayuntamiento de Cuautla, que preside el alcalde Rodrigo Arredondo López, quien pretende realizar una obra, pero se ha negado a transparentar el procedimiento.

“No sabemos si el incendio fue provocado o fue por un corto. Que expertos investiguen y determinen cuáles fueron las causas; casualmente se pretendía iniciar nuevamente con un proyecto en este mercado, cambiar una techumbre, pero nunca se nos informó el nombre de la constructora, cuántos días iba a durar la obra, cuándo iniciaba y cuándo terminaba… Se solicitó conocer el contrato; tampoco se nos mostró. Se solicitó a través de oficios y no nos han dado respuesta. Casualmente no tuvimos agua dos días en el mercado… Con cubetas lo apagamos; no decimos quién lo hizo o quién no lo hizo, pero esto se tiene que investigar”, señaló Amalia Hernández, locataria de ese mercado.

La misma comerciante sostuvo una discusión con el alcalde cuando éste ordeno llevar una retroexcavadora para tirar las paredes del mercado donde inició el incendio, lo que fue impedido por los inconformes, quienes aseguraron que con ello se pretendía desaparecer las evidencias de un posible sabotaje.

Arredondo López solicitó a Amalia Hernández que los dejara trabajar porque lo importante era no poner en riesgo a los comerciantes para lo cual se pretendía derribar las paredes, por lo que los comerciantes pidieron la presencia de un notario para dar fe de los hechos presuntamente sospechosos de las autoridades municipales.

El jefe de Bomberos, Mauricio Montaño, señaló que el reporte lo recibieron a las 4:30 de la mañana, por lo que en diez minutos arribaron las unidades de Cuautlixco; después las de Plan de Ayala.

“Un 70 por ciento del mercado se quemó; encapsulamos para que no llegara al área de cocina, donde hay tanques de gas. A las 07:30 horas se tuvo el control del incendio”, indicó.

El siniestro fue combatido por elementos de Bomberos de Cuautla, quienes fueron apoyados por cuerpos de emergencia de Ayala, Yecapixtla y Atlatlahucan con elementos, pipas, herramientas y vehículos. También participaron elementos del Ejército mexicano, de la Guardia Nacional, de la Cruz Roja, quienes apoyaron en el enfriamiento del inmueble y en la atención a los elementos que pudieran haber resultado intoxicados y a las personas con crisis nerviosas.

Los bomberos realizaron labores durante alrededor de tres horas para controlar el incendio.

El fuego arrasó con mercancía y mobiliario.